Una mujer acusada de encargar el asesinato de dos policías en Benidorm aceptó ayer una pena de diez años de cárcel tras declararse culpable de los hechos, según fuentes del caso. Las dos funcionarias habían ido a la casa de la acusada el 3 de febrero de 2014 a apoyar a los Servicios Sociales para retirarle la custodia de sus hijos menores de edad.

La persona a la que propuso cometer el crimen (y a la que llegó a comprometerse a facilitar una pistola para llevarlo a cabo) la denunció a en Comisaría al ver que la oferta iba en serio. La intención de la procesada era seguir a las dos agentes cuando salieran del trabajo y acabar a tiros con sus vidas y la petición expresa de acompañar al ejecutor para que ambas vieran que era cosa de ella.

La acusada lleva en prisión preventiva desde su detención y hasta ahora negaba los hechos y decía que todo era una broma. Ayer admitió los hechos y será condenada a diez años de prisión por proposición de asesinato. También durante 20 años no podrá volver al lugar de residencia de las víctimas.