José Ramón M. Ll., el hombre que asesinó a su vecina e hirió a la pareja de ésta y después confesó el crimen a Levante-EMV, antes de entregarse en agosto de 2013, logró reducir ayer de 25 a 5 años de prisión la pena de cárcel, tras admitir los hechos, antes de que se conformara el tribunal del jurado que iba a juzgarlo.

La Fiscalía solicitaba para José Ramón M. Ll. la pena de «17 años de prisión por un delito de asesinato» y otros «8 años por asesinato en grado de tentativa». El Ministerio Público lo acusaba de disparar a sus vecinos, a través de una ventana, con una escopeta de caza, tras unas «disputas por temas de vecindad» surgidas en sus respectivas «casetas» de campo ubicadas en término municipal de Sagunt.

Debido a los disparos, la mujer Dangira M., falleció desangrada tras sufrir graves heridas en la arteria femoral. Su pareja sentimental, P. B., «sufrió lesiones en la región glútea, perianal y pelvis» de las que le ha quedado «un dolor en pierna izquierda» y diez perdigones incrustados en el cuerpo.

José Ramón M. Ll. admitió ayer todos estos hechos ante el magistrado de la sección cuarta de la Audiencia de Valencia, que iba a juzgarlo junto al tribunal del jurado. Sin embargo, el tribunal popular no llegó a conformarse al aceptar el acusado los hechos y reconocerse culpable. La confesión de José Ramón M. Ll. es., de hecho, una de las atenuantes que se le aplicó al acusado para rebajar considerablemente la pena, según la petición de la Fiscalía. Las otras dos se refieren a la de «arrebato por obcecación», ya que el acusado estaba obsesionado con que el vecino iba a matar a su hija, por las presuntas molestias que supuestamente la joven causaba con las fiestas que realizaba en la caseta.

Y, por último, también se le aplica a José Ramón M. Ll. la atenuante de «reparación del daño, muy calificada» ya que ha abonado 7.800 euros a su vecino e ingresa «todos los meses pequeñas cantidades de dinero», que obtiene del trabajo que realiza en la cárcel.

De hecho, al reconocerse culpable José Ramón M. Ll. también reconoce la obligación de indemnizar con 150.000 euros a su vecino por la muerte de su compañera, con 5.160 euros por las lesiones y 10.800 euros más por las secuelas, además de otros 21.000 euros al hijo de la fallecida. Según fuentes de la Fiscalía, la familia podría reclamar al Estado el pago íntegro de la indemnización que, después, se reclamaría al acusado.

Desde el ministerio público defendieron el acuerdo por conformidad alcanzado entre la Fiscalía y la defensa del acusado ya que, explicaron, el jurado debía declarar como hecho probado que el acusado tenía intención de matar y existía el riesgo de que acabara absuelto al considerarse el disparo fortuito.