El juez ha decretado el ingreso en prisión de uno de los detenidosen Torrent por la Guardia Civil por estafar más de 126.000 euros a 32 personas con contratos de compraventa de naranjas de dudosa procedencia.

La Guardia Civil no descarta que aumente el número de afectados, que podría llegar a 50 personas, por las actuaciones de estos hombres, a los que se acusa de delitos de estafa, usurpación de estado civil, derecho contra los trabajadores y falsedad documental.

Las investigaciones comenzaron en noviembre de 2015 tras unas inspecciones en un almacén de la localidad de Picassent al tener conocimiento de que un hombre presentaba contratos de compraventa de naranjas de dudosa procedencia.

Entonces se inició la operación "TINAMA" por parte del Equipo Roca de la Guardia Civil de Paiporta y se averiguó que se trataba de dos hombres que estafaban a los agricultores y a las cuadrillas que contrataban para la recogida de la naranja.

Como contó este diario el 11 de febrero fueron detenidos dos hombres de 28 y 39 años de edad, de nacionalidades española y rumana, el primero de ellos el cabecilla, que hacía las compras directamente con los propietarios o bien con las personas a cargo de estos campos.

Para ello realizaba un contrato de compraventa de la producción en el que pactaba las fechas de la recolección, así como la fecha tope de pago de lo recolectado a sus propietarios y cuadrillas encargadas de la recogida, contrato que nunca cumplía. Éste iba acompañado de otro hombre que estaba autorizado a cobrar, facturar y vender naranja a su nombre.

Una vez con la mercancía en su poder, la preparaban en una nave de alquiler en el polígono industrial de Picassent para mandarla a terceros países o bien venderlas a un almacén de la misma localidad, donde recibía el dinero de la venta en metálico, venta que realizaba a un precio inferior que el que negociaba con los propietarios de los campos.

En otros casos para hacer parecer lícita la procedencia de la mercancía utilizaba datos de propietarios de campos que no recolectaban, y en una ocasión falsificó un contrato de recolección para una empresa de Alginet, que se dio cuenta de la estafa al solicitarle el abono de la deuda del contrato.

La Guardia Civil realizo tres registros, uno de ellos en la nave de alquiler del principal detenido, que carecía de permisos administrativos para realizar activad alguna, tampoco contaba con licencia ambiental, de registro sanitario y de las altas en la seguridad social de sus empleados.

En los registros siguientes realizados en los domicilios de los dos detenidos los agentes se han incautado de numerosa documentación como facturas, cartillas, datos bancarios y dinero en metálico.

Las diligencias han pasado a disposición del Juzgado de Instrucción número 3 de Picassent, cuyo titular ha decretado la entrada en prisión del detenido de nacionalidad española.