La Policía Nacional y la División de Drogas del Servicio de Aduanas de Estonia han desarticulado una organización que traficaba con hachís a gran escala en España, Estonia, Polonia y Rusia. Quince personas han sido detenidas, cinco de ellas en España, y se han incautado de más de 1.000 kilos de hachís, según ha informado la Dirección General de la Policía en un comunicado.

La sustancia estupefaciente era conseguida por el líder de la organización criminal en Fuengirola (Málaga), tras reunirse con ciudadanos de origen marroquí. Para ello se desplazaba periódicamente desde Benissa, donde residía. Después, la droga era transportada desde España al resto de países oculta en vehículos preparados con un doble fondo para evitar que fuese detectada en la frontera.

La organización estaba asentada tanto en Estonia como en España, en concreto en Valencia y distintas localidades de Alicante.

En total, 15 personas han sido detenidas, cinco de ellas en España, siete en Estonia -donde se han realizado 18 registros- y tres en la frontera de Polonia. Además, en este operativo los investigadores se han incautado 1.200 kilogramos de hachís en diferentes puntos de Europa.

Por su parte, las investigaciones españoles han concluido con siete entradas y registros en Valencia, Benissa, Altea, Calp y Moraira, donde los agentes han intervenido sustancias estupefacientes, material para su empaquetado, dos revólveres, munición variada, tres relojes de alta gama valorados en más 100.000 euros, varios coches de lujo, 20.000 euros en efectivo y bienes adquiridos con los beneficios de su actividad ilícita.

Estonia pide la colaboración de España en 2015

La investigación comenzó en el verano de 2014 por parte de las autoridades aduaneras en Estonia sobre la organización que traficaba con hachís en estos cuatro países. Sin embargo, en marzo de 2015, las autoridades estonias solicitaron la colaboración de la Policía Nacional en un dispositivo de vigilancia y control de diversos objetivos estonios y rusos durante su estancia en la Comunitat Valenciana.

Los agentesdescubrieron que en un chalé de una localidad valenciana estaba siendo preparado el doble fondo de un vehículo para esconder la droga. Al parecer, este coche sería conducido hasta Bielorrusia, a través de Polonia, por un miembro de origen ruso de la organización.

Tras comprobar esta información, los agentes contactaron con las autoridades competentes mediante Europol y el vehículo fue detenido en la frontera de Polonia y Bielorrusia con 105 kilogramos de resina de hachís.

Poco después, otro vehículo, esta vez conducido por una mujer y un hombre que viajaban con un menor -con el objetivo de pasar desapercibidos-, fue localizado en su trayecto desde España hacia Rusia. En la frontera se incautaron de 200 kilogramos de hachís ocultos también en un doble fondo.

La operación se ha realizado por agentes pertenecientes a la Udyco de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Valencia, en colaboración con el G.O.I.T. y la Comisaría Provincial de Alicante en una operación conjunta con la División de Drogas del Servicio de Aduanas de Estonia.