Los dos atracadores detenidos el jueves por la noche por la Policía Nacional instantes después de que asaltaran un salón de juegos de la calle Russafa, en Valencia, como adelantó ayer en exclusiva Levante-EMV, ataron de pies y manos a la empleada para forzar las máquinas y llevarse la recaudación. Fuentes policiales cifraron ayer en 3.648 euros el dinero sustraído, que fue recuperado en su totalidad gracias a la rápida actuación de los agentes,

Los detenidos, que aún no han pasado a disposición judicial porque agentes del grupo de Sirlas tratan de averiguar si son responsables de algún asalto violento más, son españoles y tienen 29 y 31 años. Ambos poseen antecedentes por delitos similares.

Tal como publicó ayer este diario, los dos presuntos delincuentes entraron en el salón de juegos a las once de la noche, cuando la única empleada del establecimiento estaba cerrando. Armados con sendos cuchillos de 25 centímetros de hoja, intimidaron a la chica y la amenazaron con matarla, para, a continuación, atarla de pies y manos con bridas. Luego, forzaron varias máquinas y se hicieron con casi 4.000 euros, tras lo cual salieron corriendo del local.

Uno de ellos se subió a la moto robada que llevaban y el otro lo empujó para arrancarla. En ese momento, un agente del primer furgón policial que llegó al lugar se lanzó sobre ellos y evitó la huida. Ambos fueron detenidos tras oponer una fuerte resistencia. Los policías también recuperaron el botín íntegro y los cuchillos, y liberaron a la chica, que fue encontrada debajo de un mostrador.