La Policía Nacional y la Guardia Civil desarticularon a lo largo del año pasado 82 bandas de crimen organizado en la Comunitat Valenciana, lo que derivó en la detención de 2.319 personas, en su gran mayoría hombres, tras haber investigado a 8.273 sospechosos, lo que significa que sólo se encontró materia incriminatoria contra un 28 % del total de investigados.

Por provincias, fue Valencia donde más organizaciones fueron desmanteladas, 39, seguida de Alicante, con 32, a las que se suman las once desarticuladas en Castelló, según las cifras facilitadas ayer por el delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Moragues.

La mayor parte de los grupos mafiosos se dedicaban al tráfico de cocaína (32 grupos), a los robos con fuerza -tanto en domicilios como en establecimientos-, a las estafas y al tráfico de hachís.