Agentes de la Policía Nacional han detenido en Gandia a un hombre de 35 años por amenazar e insultar a su expareja, con la que está en trámites de divorcio, a través de una conversación telefónica, así como por llevarse al hijo de ambos a la fuerza en plena calle. Según informó ayer la Policía en un comunicado, la mujer comunicó a los agentes que había recibido una llamada telefónica de su expareja en la que le dirigía insultos y amenazas.

Instantes después de la llamada, cuando la mujer y su cuñado caminaban por la calle, se encontraron con la expareja de ella, que paró el vehículo en el que viajaba, se bajó y se dirigió hacia ellos llevarse a la fuerza al hijo de ambos. El cuñado de la víctima intentó mediar, pero recibió un puñetazo en la cabeza.

Insultos anteriores por mensaje

Los policías averiguaron que el presunto autor ya había insultado y amenazado a la víctima anteriormente a través de Whatsapp, así que lo detuvieron por un presunto delito de malos tratos en el ámbito familiar.

El hijo fue entregado a una de las hermanas del detenido, mientras que al hombre se le retiraron las armas de su propiedad, así como las guías de pertenencia y licencia de armas, que entregó de manera voluntaria.

El detenido, de origen español y con antecedentes policiales, ha pasado a disposición judicial, que dictó una orden de alejamiento que le impide acercarse a la mujer a la distancia estipulada por el juez.