En marzo de 2014 fue arrestado en un control policial en la partida alicantina de Bacarot por intentar agredir a los agentes que le iban a detener por conducir con el carné sin puntos. Catorce meses después, el juicio por aquellos hechos le ha coincidido con la final de la Champions en Milán que enfrenta al Real Madrid y al Atlético de Madrid y el acusado ha preferido que se celebre el juicio sin él, sin posibilidad de defenderse en persona, al alegar que se trata de un partido histórico. La vista se celebró sin el implicado ya que la Ley lo permite cuando la pena es inferior a dos años de cárcel.

Pocos días antes de celebrarse el juicio sin él fue al juzgado a avisar de que se trataba de «un acontecimiento histórico» y que, sintiéndolo mucho, no iba a poder asistir ese día, por lo que planteó un cambio de fecha para ir con unos amigos en autocaravana a Milán.

Y así ha sido finalmente, el procesado no acudió el pasado miércoles al juicio, aunque éste pudo celebrarse en su ausencia y con su abogado defensor. La Ley permite celebrarlos en ausencia del acusado cuando la pena que se le reclama es inferior a los dos años de prisión. En este caso concreto, la Fiscalía reclamaba una pena de seis meses de cárcel por un delito de resistencia a la autoridad.