Una joven de 19 años y nacionalidad croata fue arrestada el viernes por la tarde tras ser sorprendida intentando forzar la cerradura de una vivienda del distrito de Trànsits junto a otras dos cómplices, que también acabaron detenidas. Sin embargo, el caso de Marina J. era especial. La muchacha estaba embarazada y salía de cuentas en breve. Tanto es así que estando ya en los calabozos de las dependencias policiales la detenida empezó a sufrir contracciones y se puso de parto, según ha podido saber este periódico.

Rápidamente, los agentes al ser alertados por las otras arrestadas de lo que estaba ocurriendo avisaron a una ambulancia, cuyos sanitarios trasladaron de urgencia a la joven al Hospital La Fe de Valencia. Fue allí donde finalmente dio a la luz a una preciosa niña.

Intentaba forzar una cerradura

Los hechos ocurrieron el viernes por la noche apenas unas horas después de la detención de tres jóvenes de origen croata, de entre 19 y 21 años, que fueron sorprendidas manipulando una cerradura de un portal de un portal de una vivienda del distrito de Trànsits. Una de ellas era la embarazada, que posteriormente se pondría de parto en los calabozos.

La detención se produjo en torno a las 17 horas del pasado viernes después de que la Sala del 091 recibiera un aviso de tres mujeres jóvenes que se encontraban merodeando y llamando a los timbres de varios portales en actitud sospechosa. Tras dar una batida por la zona una patrulla de la Policía Nacional observó a tres chicas, cuyas características físicas coincidían con las de las sospechosas, junto a una puerta de una finca. Dos de ellas estaban en la cerradura mientras la tercera hacía, al parecer, labores de vigilancia.

Las sospechosas, al percatarse de la presencia policial, trataron de ocultarse entre los coches, y arrojaron debajo de los vehículos dos destornilladores y un trozo de plástico. Todo indica que estaban intentando forzar la entrada mediante el método del «resbalón», según apuntaron fuentes policiales. Por lo que fueron detenidas como presuntas autoras de un delito de robo con fuerza, en grado de tentativa.

Una de las arrestadas estaba visiblemente en avanzado estado de gestación, pero pese a ello fue trasladada a los calabozos. Una vez allí comenzó a decir que estaba empezando a sentir contracciones, y aunque es relativamente habitual que arrestadas embarazadas traten de eludir su responsabilidad esgrimiendo su estado, los agentes alertaron a los servicios médicos para que la trasladaran de urgencia al hospital.

La joven no mentía, esa misma medianoche dio a luz a una niña en el Hospital La Fe de Valencia. La pequeña nació bien aunque permanece en una incubadora del servicio de neonatos. Su madre sigue ingresada en el centro hospitalario, vigilada por la policía en calidad de detenida, hasta que se recupere y sea puesta a disposición judicial para tomarle declaración por la tentativa de robo con fuerza.