Después de la tromba de agua que anegó algunas de las calles de la ciudad de Valencia y que llegó incluso a tumbar algunos árboles, una mujer, ahora detenida por la Policía Nacional, decidió que era el momento perfecto para abandonar a su suerte a la anciana de 90 años y en silla de ruedas de la que se hacía cargo desde hacía unos meses para marcharse de fiesta al barrio de Velluters.

Los hechos ocurrieron alrededor de las 22.30 horas del martes en la calle San Vicente de Valencia. Una mujer española de 37 años entró en una cafetería donde pidió una consumición y preguntó «cómo se podía llegar al barrio chino». Cuando llegó el momento de pagar, confesó que no llevaba dinero al igual que la nonagenaria de la que se hacía cargo e inició una discusión con ella durante la que decidió marcharse y abandonarla.

«Aquí te dejo a la abuela, yo me voy», le espetó a uno de los empleados del establecimiento. Entonces este trabajador avisó al 091. La Policía Nacional encontró a la mujer momentos más tarde en la calle y ésta confesó «que no había comido en todo el día y que tenía frío». Ésta les explicó lo que había ocurrido y que su cuidadora le había confesado que tenía que acudir «a la calle Viana», y que por eso la dejaba allí. La anciana facilitó la descripción de la sospechosa y pusieron en marcha un dispositivo de búsqueda.

Tan solo una hora después, alrededor de las 23.30 horas, varios agentes encontraron a la detenida en la calle en la que ella misma había asegurado a la anciana que se encontraría. La sospechosa confesó el abandono de la mujer mayor por lo que los policías la detuvieron. En ese momento, la sospechosa adoptó una actitud violenta y se negó a ser arrestada increpando e incluso agrediendo a los agentes.

Acusada de abandono

La nonagenaria fue rápidamente trasladada al hospital Clínico de Valencia debido a la delicadeza de su estado de salud y posteriormente los Servicios Sociales fueron los que se hicieron cargo de ella.

La arrestada, que aún no ha pasado a disposición judicial, está acusada de los delitos de abandono de familia y desobediencia a agente de la autoridad. Además, la Policía Nacional también investiga si le sustrajo dinero. En caso de confirmarse, la acusación se ampliaría al delito de hurto o de apropiación indebida, según las circunstancias.