Agentes de la Policía Nacional han detenido a una mujer de 30 años como presunta autora de los delitos de lesiones y omisión del deber de socorro, tras supuestamente atropellar a un menor que iba en bicicleta y abandonar el lugar con un fuerte acelerón. Según ha informado la Jefatura en un comunicado, la mujer, de nacionalidad boliviana, vendió el coche unos días más tarde después de reparar parcialmente los daños.

Los hechos ocurrieron el 15 de septiembre cuando agentes que patrullan en servicio de prevención fueron alertados por la Sala 091 para que acudieran a la calle Padre Viñas cruce con Reig Genovés donde habían atropellado a un joven en bicicleta.

Los agentes se encontraron en el lugar a un joven "aturdido y tambaleándose", con una herida abierta en la ceja y dolor en las extremidades así como una bicicleta de una empresa municipal "visiblemente dañada". Los policías avisaron a los servicios sanitarios.

La víctima, un chico de 17 años, acababa de tener un accidente de tráfico cuando circulaba con la bicicleta por el carril reservado a estos vehículos cuando fue golpeado por un coche que, en vez de parar tras el impacto, presuntamente aceleró y abandonó el lugar, dejando al herido inconsciente en el suelo. Tras la llegada de los servicios sanitarios y una primera exploración del menor fue trasladado a un hospital de Valencia.

AVERIGUARON EL VEHÍCULO

Los investigadores averiguaron el color, marca y modelo del vehículo implicado así como posteriormente la identidad de la conductora, que presuntamente había arreglado parcialmente el vehículo y lo había vendido cinco días después del accidente.

Al nuevo propietario le había dicho que el día 3 de septiembre había tenido un golpe en la calle Yecla y que había arreglado parte de los daños ocasionados en el coche. Los agentes localizaron a la conductora y la detuvieron como presunta de los delitos de lesiones y omisión del deber de socorro. La ahora arrestada manifestó y mantuvo "en todo momento" que el vehículo implicado en el atropello lo había vendido dos días antes del hecho y aportó para ello un contrato con tal fecha.

La detenida, sin antecedentes policiales, tras prestar declaración fue puesta en libertad tras ser ser advertida de su obligación de comparecer ante la autoridad judicial cuando sea requerida para ello.