El Tribunal Supremo ha condenado a tres años y seis meses de prisión por un delito continuado de estafa a un hombre que se amputó una mano y simuló un accidente de tráfico para cobrar la indemnización correspondiente a las pólizas que había suscrito con ocho compañías de seguros.

La sentencia del alto tribunal estima de forma parcial el recurso interpuesto por el acusado en tanto le rebaja la pena de prisión de cuatro años interpuesta por la Audiencia Provincial de Castelló pero en todo lo demás hace suyo el criterio del fallo recurrido para condenarle.

Según concluye la Sala de Lo Penal, tendrá que devolver 335.000 euros a tres aseguradoras contratadas, por las acciones judiciales que emprendió tras el accidente para cobrar las pólizas de seguro suscritas -con algunas aseguradoras tenía hasta tres-. El condenado era de profesión agricultor y tenía problemas económicos que le habían llevado al embargo de su vivienda y vehículo.

Los hechos se produjeron en diciembre de 2007 cuando este individuo, no se sabe si solo o con ayuda de terceros, se amputó con un instrumento cortante la mano derecha para cobrar dichas coberturas; se hizo un torniquete para frenar la hemorragia y se dirigió con su coche a una carretera que une las localidades de Nules y Moncófar. Allí dejó caer el coche por un terraplén y colocó la mano a los pies del asiento del conductor, e incendió su automóvil.