Un hombre de 59 años y nacionalidad belga ha aceptado esta semana una pena de cuatro años de prisión por haber abusado sexualmente de forma continuada de una menor de solo ocho años, hija de unos amigos. Los abusos se producían cuando el ahora condenado se quedaba a solas con la niña, aprovechando la relación de confianza que tenía con sus padres. Estos hechos, ocurridos en un domicilio de Oliva, prolongaron durante casi un año entre los meses de junio de 2014 y marzo de 2015.

El Ministerio Fiscal pedía para el acusado una pena de once años de cárcel por un delito continuado de abusos sexuales a un menor de edad. No obstante, en el juicio celebrado el pasado martes en la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Valencia éste acabó reconociendo los abusos y las partes llegaron a un acuerdo de conformidad por el que veía considerablemente rebajada la pena solicitada inicialmente por la Fiscalía. Así, se le ha impuesto una condena de cuatro años de prisión, así como la prohibición de aproximarse o comunicarse con su víctima una vez cumpla la pena de cárcel.

Denuncia en marzo de 2015

Los hechos fueron denunciados por la madre de la menor en marzo de 2015 después de que su hija relatara los abusos a unos educadores en el comedor de su colegio, en un municipio de la Safor cuyo nombre omitimos para preservar el anonimato de la víctima. Hasta entonces la niña ocultó lo que estaba pasando por miedo, como ocurre en muchas ocasiones en las que la propia víctima se siente culpable o su agresor le hace pensar que no la creerían.

En este caso en concreto la persona que la sometía a tocamientos de forma continuada era un amigo de sus padres, de nacionalidad belga, que en ocasiones se quedaba a solas con ella en el domicilio de éste, en la localidad de Oliva. Según ha quedado acreditado tras la confesión del acusado, éste «con la intención de satisfacer sus deseos sexuales, le realizó tocamientos en su zona genital y trató de que le realizara una felación. Por entonces la menor tan solo tenía ocho años de edad.

La Audiencia Provincial de Valencia considera los hechos constitutivos de un delito continuado de abuso sexual porque no se trató de un día puntual, sino que ocurrieron «en numerosas ocasiones en fechas comprendidas entre junio de 2014 y marzo de 2015».