La Policía Nacional ha desmantelado una banda organizada dedicada al tráfico de drogas que operaba desde un hotel del barrio valenciano de Campanar, donde elaboraban los paquetes de hachís, para posteriormente distribuirlos por el país utilizando el servicio regular de autobuses de la estación de Valencia. Pequeños restos de las sustancias estupefacientes hallados en la bañera de la habitación del hotel donde habían estado alojados levantaron las sospechas entre los empleados del establecimiento.

En total han sido arrestados cuatro hombres, tres de nacionalidad rumana y un español, acusados de un delito contra la salud pública y pertenencia a banda organizada. Los agentes les intervinieron cerca de ocho kilos de hachís, distribuidos en 17 bolsas, cuando se disponían a subir en los autobuses para distribuir la droga en otros puntos de la geografía española. Asimismo también se les intervinieron unos 10.000 euros en metálico.

Las investigaciones comenzaron el pasado mes de septiembre cuando una patrulla de la Policía Nacional identificó a tres ocupantes de un vehículo en actitud sospechosa. Tras realizar un registro del coche los agentes hallaron unos 9.000 euros en metálico. Aunque los tres sospechosos, de origen rumano, quedaron en libertad, a raiz de ese hallazgo se estableció un seguimiento sobre los mismos para corroborar si se trataba de alguna banda organizada y la posible procedencia ilegal del dinero.

Al parecer, los sospechosos utilizaban como base de operaciones un mismo hotel de Valencia, próximo a la estación de autobuses, donde preparaban la droga en paquetes listos para su posterior distribución.

El pasado jueves por la mañana la policía procedió a la detención de los cuatro presuntos miembros de la banda y realizó un registro en la habitación del hotel donde se alojaban. En total se incautaron de ocho kilos de hachís. Tras pasar a disposición del Juzgado de guardia, tres de los arrestados ingresaron en prisión provisional y el cuarto, de nacionalidad española, quedó en libertad con cargos.