La Policía Nacional y la Agencia Tributaria han detenido en Valencia a dos personas por su presunta relación con una red internacional de narcotraficantes que ocultaba la droga en trasteros para venderla por Europa como si fueran productos cosméticos.

Según ha informado la Dirección General de la Policía Nacional, dicha red creaba empresas con apariencia lícita y sede en Letonia, que importaban productos químicos desde China a Málaga y Madrid y enviaban la mercancía por mensajería a Valencia, donde alquilaban trasteros con documentación falsa para ocultarla y fabricar diferentes drogas de diseño.

Posteriormente, la vendían a diferentes países europeos en paquetes de entre 600 gramos y un kilo, que declaraban como productos de cosmética y belleza.

En la operación ha sido detenidas dos personas de nacionalidad letona e intervenidos 470 kilos de sustancias químicas, según las mismas fuentes.

Las investigaciones se iniciaron a principios de este año, cuando los agentes tuvieron conocimiento de la existencia de una organización que se estaría dedicando al tráfico de estupefacientes y sustancias psicotrópicas.

Dicha organización creó varias empresas que tenían como administradores a ciudadanos de Letonia que no residían en España y daban como domicilio fiscal su país.

Las importaciones las realizaban desde Málaga y Madrid, pero el destino final de los productos que importaban era Valencia, y una vez allí ocultaban la mercancía en trasteros que previamente habían alquilado con documentación falsa.

En dichos trasteros también manipulaban y fabricaban las drogas de diseño, las cuales eran vendidas a diversos países de Europa entre ellos Bélgica, República Checa, Holanda, Polonia y Grecia.

Los miembros de la red enviaban la droga en paquetes de entre 600 gramos y un kilo, que declaraban como productos de cosmética y belleza para evitar cualquier tipo de control, y al parecer habían introducido unos 5.000 kilos en algo más de tres años.

Durante la investigación, los agentes detectaron una importación a través del aeropuerto de Málaga con 79 kilos para una de las empresas investigadas.

Establecido el dispositivo de vigilancia sobre el trastero donde se encontraba esta mercancía comprobaron como los sospechosos se dirigían a otro diferente y de ahí a una oficina de correos, donde efectuaron 22 envíos y seguidamente se trasladaron a una agencia de transportes de otra localidad valenciana y realizaron otros 10 envíos más.

Como resultado de las pesquisas, averiguaron que los paquetes que enviaban contenían entre otras sustancias, anfetaminas y cannabis sintético, por lo que detuvieron a dos hombres y realizaron varios registros domiciliarios.

En los registros se incautaron de 470 kilos de sustancias químicas, 10 teléfonos móviles y soportes de SIM, cinco ordenadores portátiles, dos impresoras, una selladora térmica industrial, tres básculas de precisión, una cámara fotográfica, tres sellos-tampones de empresas, más de 10.000 sobres de envíos y 6.355 euros.

La operación ha sido desarrollada por agentes de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Valencia y el Área Regional de Vigilancia Aduanera de Valencia.