Una mujer de 86 años falleció en la madrugada de ayer al arder su vivienda, una planta baja situada en el centro de Benifaió. De nuevo, un incendio fortuito, al parecer por un fallo eléctrico, se convirtió en una trampa mortal para una persona con movilidad reducida. La anciana, identificada como Elena Hernández, padecía obesidad mórbida y fue sorprendida por las llamas cuando estaba sentada en un sillón, junto a una mesa camilla en el salón del domicilio. Su marido, de 84, también se encontraba en el inmueble pero la rápida intervención de los policías que entraron y lograron ponerlo a salvo evitó que hoy estuviéramos hablando de dos fallecidos.

El hombre gritó a los agentes de la Policía Local de Benifaió que lo rescataron que en el interior estaba también su hijo, así que un guardia civil, quien también tuvo que ser atendido por inhalación de humo, trató por otro lugar de la casa acceder al punto en el que podía encontrarse éste. Finalmente se confirmó que no había nadie más y que el hijo del matrimonio no había pasado la noche en la casa. Tanto el marido de la fallecida como el guardia civil, de 32 años, tuvieron que ser atendidos por intoxicación y trasladados al Hospital de la Ribera.

El marido se refugió en un patio

El fuego se inició por causas que se investigan en una vivienda del número ocho de la calle de Espartero de Benifaió minutos después de las cinco y media de la madrugada de ayer. Agentes del grupo de Investigación de Incendios de la Guardia Civil estuvieron ayer en el lugar analizando las posibles causas del fuego. En la vivienda había un brasero, cerca de la mesa camilla, y la principal hipótesis que manejan los investigadores es un fallo eléctrico.

La mujer murió calcinada por el fuego al prenderse las mantas con las que estaba tapada en el sillón que desde hace tiempo utilizaba para dormir debido a que apenas podía estar tumbada, según apuntaron las fuentes consultadas por este periódico.

Hasta el lugar acudieron rápidamente agentes de la Policía Local de Benifaió, quienes sofocaron las llamas con un extintor y accedieron al interior del inmueble para rescatar a sus moradores antes de la llegada de los bomberos. El marido de la fallecida se había refugiado en un patio interior y pudo ser sacado sano y salvo por los policías. Peor suerte corrió su esposa, quien falleció como consecuencia de la acción del fuego y los sanitarios del SAMU solo pudieron confirmar su fallecimiento.

Bomberos de los parques de Silla y Alzira del Consorcio Provincial terminaron de extinguir las llamas y ventilar la vivienda, mientras que la ambulancia atendió a un guardia civil y al marido por inhalación de humo.