Agentes de la Policía Nacional han detenido una pareja por explotar en el restaurante chino que regentaban en València a cinco trabajadores, a los que hacían trabajar todos los días de la semana, durante diez horas y por 15 o 20 euros diarios, y solo les permitían comer arroz blanco.

Los trabajadores, dos de ellos de nacionalidad española y tres extranjeros, "trabajaban de forma ilegal y soportaban una precaria situación laboral por necesidad económica y por tener a menores a su cargo", según un comunicado de la Jefatura Superior de Policía.

Los hechos se descubrieron en el transcurso de las inspecciones de trabajo en bares, restaurantes y locales de ocio llevadas a cabo entre la Policía Nacional y la Inspección de Trabajo y Seguridad Social de Valencia, en un restaurante de comida china.

Allí comprobaron que al menos cinco trabajadores, dos de nacionalidad española y tres extranjera, se encontraban trabajando de forma ilegal y en condiciones laborales lamentables.

Estos empleados carecían tanto de Seguridad social como de seguro médico y, al parecer, "trabajaban en jornadas maratonianas todos los días de la semana unas diez horas diarias por un salario de 15 a 20 euros diarios, y donde solo se les permitía comer arroz blanco", según las fuentes.

Los policías, tras las comprobaciones oportunas, detuvieron a la pareja que regentaba el restaurante, un hombre y una mujer de 44 y 27 años respectivamente, de origen chino, como presunta autora de un delito contra los derechos de los trabajadores.

Por parte de la Inspección de Trabajo y la Seguridad Social, se tramitó el correspondiente expediente sancionador, según las fuentes, que han indicado que los detenidos, el hombre con antecedentes policiales, han pasado a disposición judicial.