La sección tercera de la Audiencia Provincial de Valencia ha condenado a un año de prisión a una mujer que forzó sexualmente a otra, de la que estaba celosa ya que había mantenido relaciones sexuales con su compañero sentimental.

Según consta en la sentencia, hecha pública por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), la condenada puso sus genitales en la cara de la víctima a la fuerza, e intentó, sin conseguirlo, que le hiciera un cunnilingus.

La sentencia, que la considera autora de un delito de agresión sexual, le impide acercarse a 500 metros de la víctima, a la que deberá indemnizar con más de 1.700 euros por las lesiones y los perjuicios morales que le causó.

Al mismo tiempo, la sala absuelve al compañero sentimental de la condenada, que estaba acusado por el mismo delito por el que ambos se enfrentaban a una petición fiscal de doce años de cárcel.

Los hechos sucedieron en marzo de 2016 cuando la agresora, de origen rumano, que conocía a la otra mujer, de origen paraguayo, porque ejercían la prostitución en el mismo local, llamó a la víctima para proponerle un trío con su pareja sentimental, un hombre de nacionalidad lituana.

Los tres cenaron en un local de Valencia y posteriormente subieron a la vivienda de la pareja.

Ya en la casa, el hombre y la víctima mantuvieron relaciones sexuales consentidas, hecho que también se había producido el día anterior pero a cambio de dinero.

Tiempo después, la condenada comenzó a forcejear con la agredida para exigirle que tuviera sexo con ella, por lo que le puso los genitales en la cara para que le practicase sexo oral, a lo que la víctima se opuso.

Como consecuencia del forcejeo, la víctima sufrió lesiones consistentes en una pequeña erosión en el labio superior, una marca con eritemas en el lado izquierdo del cuello y diversos arañazos en los brazos, en el pecho y en la pared abdominal, que tardaron en curar siete días sin incapacidad, según consta en la sentencia.