La Policía Nacional ha desarticulado una banda de ciudadanos brasileños que se dedicaba a explotar sexualmente a jóvenes compatriotas en casas de citas de España e Italia. En la operación han sido liberadas tres víctimas y se ha evitado que otras cuatro fueran obligadas a prostituirse. Además hay cinco detenidos, dos de ellos en València, acusados de captar en su país de origen a mujeres jóvenes en situación de necesidad a través de los familiares o personas de confianza de los proxenetas.

Los ahora detenidos enviaban dinero a Brasil para que los captadores adquiriesen billetes de avión para las víctimas y sufragasen cualquier otro gasto derivado de su traslado a España.

Una vez en nuestro país, eran recibidas por miembros de la organización y trasladadas inmediatamente a diferentes casas de citas o habitaciones alquiladas, tanto en España como en Italia.

La organización alquilaba pisos y habitaciones durante muy poco tiempo, entre una semana y un mes, con lo que las víctimas eran trasladadas continuamente hasta el punto de que algunas jóvenes habían estado en más de veinticinco localidades españolas y al menos en tres poblaciones italianas diferentes. Esto les permitía poder ofrecer novedades continuamente a sus clientes, lo que les proporcionaba mayores beneficios económicos.

Además habían implantado el sistema que denominaban «la caja», según el cual cada miembro de la organización, incluidas las mujeres explotadas, debía ingresar mensualmente una cantidad de dinero que rondaba los 1.000 euros. De lo aportado recibían una parte previamente estipulada a modo de ahorro. De esta forma, se aseguraban la fidelidad de las víctimas al hacerlas partícipes de los beneficios obtenidos de su trabajo.

Prostituían a una menor

Por otra parte, un matrimonio, de 40 y 46 años, ha sido detenido también en València acusado de tener a una menor prostituyéndose en la casa de citas que regentaban. La víctima, de 17 años, tras varios meses ejerciendo la prostitución, decidió dejarlo en marzo, momento en el que presuntamente comenzó a recibir amenazas por parte de la mujer a través de una conocida aplicación de mensajería.