La Policía Local de València asistió a una presunta víctima de violencia machista que sufría acoso por parte de su expareja desde el pasado mes de abril, al recibir hasta 6.000 mensajes de acoso en su teléfono móvil. La mujer, de 41 años, ha logrado una orden de alejamiento de dos años del presunto agresor.

La víctima acudió esta semana al Grupo de Atención a los Malos Tratos (GAMA) de la Policía para asesorarse respecto a la situación de acoso que decía sufrir por parte de su expareja, según informó el cuerpo municipal de seguridad en un comunicado.

Los agentes informaron a la presunta víctima del procedimiento a seguir y de las posibilidades jurídicas de que disponía. Gracias a un análisis del teléfono móvil de la mujer, extrajeron varios centenares de mensajes que ella ha recibido de su expareja durante estos meses y han servido como prueba para obtener una orden de alejamiento de dos años.

Vivir con miedo

Tras las pesquisas, los policías comprobaron que la pareja había roto su relación después de un año. Sin embargo, el presunto agresor seguía a la mujer por teléfono, con llamadas y mensajes constantes durante todo el día, incluso a altas horas de la madrugada, y se llegó a presentar en su puesto de trabajo. La víctima también denunció tanto los mensajes con amenazas como la situación de acoso que «la hacía vivir con miedo».