La historia vuelve a repetirse en esta época del año, y ya es el segundo caso similar en menos de un mes. Una septuagenaria con movilidad reducida perdió la vida ayer intoxicada por el monóxido de carbono inhalado al incendiarse su vivienda, situada en un primer piso de una finca de Vinalesa.
Un agente de la Policía Local de Vinalesa se jugó su propia vida para tratar de sacarla de las llamas, pero la densa nube de humo hacía imposible el rescate. Cuando los bomberos llegaron al lugar y sacaron a la mujer ésta había entrado ya en parada cardiorrespiratoria.
Agentes de la Policía Local trataron de reanimarla con un equipo de RCP y por un momento las maniobras de reanimación cardiopulmonar hicieron albergar alguna esperanza. No obstante, y pese a que el equipo sanitario del SAMU se sumó a los intentos de reanimación en el patio de la finca, María M., de 70 años, fallecía finalmente como consecuencia de la intoxicación.
El fuego se inició, por causas que investiga la Guardia Civil, en torno a las seis de la tarde de ayer en un primer piso de un edificio de tres alturas en la calle Carraixet de Vinalesa. Un vecino alertó a la policía al escuchar los ladridos del perro y ver salir humo.
Rápidamente los agentes desalojaron la finca. Fue entonces cuando llegó la hija de la fallecida, quien había salido de casa, y comenzó a gritar que su madre estaba todavía dentro. Con las llaves de la mujer un agente trató de acceder al interior para sacar a la septuagenaria, que iba en silla de ruedas.
El policía, quien tuvo que ser asistido por inhalación de humo posteriormente en el ambulancia, se vio obligado a desistir al ser imposible el acceso. Hasta el lugar se desplazaron efectivos de Bomberos del Consorcio Provincial de los parques de Moncada, Sagunt y Pobla de Farnals, que sofocaron las llamas.
«He cogido a la chiquilla y hemos salido con lo puesto», relataba Miguel, un vecino de la finca, quien fue desalojado junto a su mujer y su hija de cuatro años.
La Guardia Civil investiga las causas del fuego y si una colilla pudo prender el sofá, ya que en una primera inspección no se encontró ningún brasero o estufa, y las fuentes consultadas apuntaron que la mujer era fumadora.
En el interior de la vivienda los bomberos encontraron junto a la mujer a su perro sin vida, que se mantuvo a su lado hasta el final.
