El triple asesino de Albalate del Arzobispo (Teruel) pasó cerca de un año en València, al parecer de manera intermitente, según confiesa él mismo en uno de los perfiles de Facebook que ha mantenido activos incluso durante los últimos ocho meses, cuando los Carabinieri mantenían supuestamente un férreo cerco en el norte de Italia para detenerle por el asesinato del dueño de un bar y de un carabinero en abril pasado cerca de Ferrara, a los que se suma el homicidio de otro hombre perpetrado en 2015.

Norbert Feher, de 42 años y nacido en Subotica (Serbia), llegó por primera vez a València en abril del año pasado, aunque, de momento, la Guardia Civil no ha encontrado rastro de su paso por el «cap i casal». El asesino múltiple incluso colgó fotos -todas ellas selfis- de su paso por la ciudad: una de ellas en un lugar desconocido, con varias jacarandas de fondo, y la otra, en un centro comercial próximo a la A3. A lo largo de los siguientes meses, y al menos hasta finales de diciembre, habría permanecido en València, aunque es probable que en ese tiempo entrase y saliese de la Comunitat Valenciana, algo que aún investiga la Guardia Civil. Al parecer, también ha estado en Málaga y en Barcelona. En el tiempo en que estuvo en València, ciudad que loa en varias ocasiones, incluso escribía en un torpe castellano sus comentarios en Facebook (los carabinieri interceptaron en abril un diccionario italo-español en su refugio de Ferrara).

Feher, experto en armas (la pistola que llevaba la había robado a un vigilante jurado meses antes de los asesinatos de abril), en artes marciales y en tiro con arco, tardó ayer en poder ser identificado por la Guardia Civil por la lentitud en responder de las autoridades italianas, que lo tienen registrado con dos nombres, uno falso y uno verdadero. De hecho, la justicia italiana lo detuvo y encarceló durante ocho años bajo la falsa identidad de Igor Vaclavic, nacido en Ucrania y antiguo soldado del ejército ruso. Ni un solo dato era cierto. Y aún así, y a pesar de que Rusia negó una y otra vez esa identidad, bajo ella permaneció en Italia hasta su excarcelación en 2015. Incluso ha sido el origen de su sobrenombre: «Igor el ruso».

Otro de los puntos que investiga la Guardia Civil ahora es si, durante esos meses en València, cometió algún robo en áreas rurales de la Comunitat Valenciana, ya que esa era su especialidad delictiva. De hecho, la condena de ocho años que cumplió en Italia le fueron impuestos como jefe de una banda de ladrones que asaltaban con violencia casas de campo y granjas aisladas.