Un presunto sicario de nacionalidad dominicana, en busca y captura por asesinar de dos tiros en la cabeza a un compatriota en Puente de Vallecas (Madrid) en febrero de 2016, fue arrestado el pasado miércoles en la estación del AVE de València al comprobar una patrulla de la Policía Nacional que pesaba sobre él una requisitoria a nivel internacional, dictada por el Juzgado de Instrucción número 13 de Madrid, por un delito de asesinato.

El sospechoso, de 24 años y natural de la República Dominicana, portaba un pasaporte con una identidad falsa en el momento de su detención, según ha podido saber Levante-EMV. Actualmente se estaba haciendo pasar por un ciudadano de origen venezolano para eludir la acción de la Justicia. No obstante, el Grupo V de Homicidios de la Brigada de Policía Judicial de Madrid había podido vincular ya ambas identidades y en la orden internacional de detención figuraban ambas para que en caso de ser localizado con este nombre falso también saltara la alerta.

Y así fue. Al comprobar su documentación, los agentes de la Policía Nacional vieron que desde junio de 2016 esta persona, cuya identidad real es Junior Rafael V. R., figuraba requisitoriado por un juzgado de Madrid como presunto autor material de un delito de homicidio doloso. El crimen que se le atribuye, y por cuya ejecución supuestamente cobró una importante cantidad de dinero, se produjo el 22 de febrero de 2016 en un portal de la avenida Miguel Hernández de Madrid. La víctima, identificada como William Giaconi H. B., falleció en el hospital tras recibir dos tiros a bocajarro en la cabeza.

En la estación del AVE

Las investigaciones del grupo V de Homicidios de Madrid permitieron identificar al presunto sicario, quien permanecía huido hasta que este pasado miércoles fue localizado y arrestado en la capital del Túria. En torno a las doce del mediodía una patrulla de la Policía Nacional, que realizaba labores de seguridad ciudadana en las inmediaciones de la estación del AVE de València, se percató de la actitud extraña del joven, quien se encontraba en compañía de unos amigos y al ver a los policías trató de darles esquinazo por otra puerta, para así evitarlos. La jugada le salió mal y ello generó todavía mayor desconfianza sobre él.

De hecho, acto seguido, los agentes procedieron a su identificación y descubrieron que la documentación que portaba era falsa y que figuraba una orden internacional de detención contra él como presunto autor material de un asesinato.

El arrestado fue puesto a disposición del juzgado de guardia, quien acordó inmediatamente su ingreso en prisión provisional ante el evidente riesgo de fuga y la gravedad del delito que se le imputa. En los próximos días será trasladado a Madrid para prestar declaración ante el juez que instruye el asesinato de 2016.