Un trabajador ha resultado herido al derrumbarse un edificio en la calle Berenguer Mallol, cercana al Jardín de Ayora y la avenida del Puerto de València. Al parecer, según las primeras informaciones de los servicios de emergencias, el derrumbe se ha producido a las 16:40 horas de esta tarde en una finca que está en obras para ser demolida.

10

Derrumbe de una finca en la calle Berenguer Mallol

Según ha podido confirmar Levante-EMV, el derrumbe ha afectado al forjado de tres plantas del edificio que se está demoliendo en estos momentos. El desplome de las tres plantas ha provocado que uno de los trabajadores que se encontraba en el lugar haya sufrido una caída de unos dos metros.

Se trata, según confirma el Centro de Información y Coordinación de Urgencias, de un operario de unos 42 años que presenta heridas de carácter leve pese a la aparatosidad del siniestro. Pese a las sospechas iniciales, se ha descartado la presencia de víctimas atrapadas bajo los escombros gracias a la intervención de la Unidad Canina de la Bomberos de València.

En el auxilio han participado una unidad SAMU, que ha trasladado al hombre herido a la Intermutual de Levante ya que presentaba un traumatismo y dolores en la espalda. Los efectivos de Bomberos de València han comprobado que no hay más personas atrapadas en el interior de la obra y se han retirado las unidades.

Un inmueble de casi 100 años

El inmueble llevaba mucho tiempo desocupado. La finca afectada es un viejo inmueble de tres plantas, propio del tiempo en el que se fueron creando los barrios nuevos camino del puerto. Esta finca, en concreto, fue construida en el año 1926. Constaba de dos plantas bajas de bajos comerciales -uon de ellos, un outlet de telas, ya abandonados, y ocho viviendas, aunque la puerta de acceso estaba tapiada con ladrillos para evitar su ocupación y forma parte de un complejo de manzanas en los que se alternan las fincas viejas rehabilitadas, las degradadas, los solares de inmuebles ya demolidos y las viviendas de nueva planta.

A pesar de lo aparatoso del derrumbe, el hecho de que la finca estuviera literalmente envuelta en los andamios, redes y vallas de aluminio no ha generado tanta alarma entre los vecinos de la zona.