Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Turismo de bajo coste

Conocer Valencia a precio de saldo

El turismo de bajo coste llega a la ciudad con ofertas para todos los gustos

Una grupo de turistas consulta un plano de Valencia en la Plaza de la Virgen. eduardo ripoll

El desembarco del turismo «low cost» es una realidad en Valencia para el desagrado de muchos vecinos y empresarios que exigen a las autoridades que busquen a un turista de mayor poder adquisitivo. Mientras tanto, la oferta turística se adapta a ellos.

CÓMO LLEGAR

Tren, autobús, coche o avión para visitar el «cap i casal»

Valencia es una ciudad conectada por tierra, mar y aire con cualquier parte del mundo. Para quienes escogen venir en avión a bajo coste, a pesar de que el vecino aeropuerto de Alicante concentra la mayoría de conexiones low cost con Europa, el de Manises-Valencia cuenta también con numerosas opciones. Sus principales destinos nacionales son los aeropuertos de Madrid-Barajas, Palma de Mallorca, Barcelona-El Prat y Sevilla , y tiene a Londres-Stansted, Munich, Milán y Paris-Charles de Gaulle como principales destinos internacionales. Precisamente desde estas ciudades europeas se pueden adquirir billetes a Valencia por unos 25 euros con aerolíneas como Ryanair o Easyjet.

Si se escoge esta opción, para ir del aeropuerto a la ciudad también hay propuestas de bajo coste. La primera: ir en metro desde el aeropuerto a cualquier punto de Valencia que tenga parada por 4,90 por trayecto. El taxi, con un precio algo superior, sale también rentable para quienes viajan en grupo con una tarifa plana de 20 euros que ascienden a 23 si el destino está en la franja que va desde el bulevar de Serrería hasta el puerto.

Si el turista viene de más cerca, una de las opciones en auge en los últimos años es la de compartir coche. En la web Blablacar se publican cada día una cincuentena de viajes a Valencia desde destinos como Barcelona o Madrid. En el primer caso el viaje ronda los 20 euros y en el segundo, el trayecto están entorno a los 15 euros.

Los viajes en autobús también son una buena opción. Y es que por unos 25 euros por trayecto compañías como Avanzabus y Alsa conectan Valencia con numerosas ciudades de España.

CÓMO MOVERSE

La bicicleta de alquiler es el medio en auge entre los más jóvenes

Para desplazarse por el interior de la ciudad, las bicicletas de alquiler son la opción preferida de los turistas extranjeros, especialmente si son jóvenes. Por el centro histórico se multiplican los negocios dedicados a ello. Por unos 10 euros al día de media, se puede alquilar una bicicleta de paseo de las más baratas. Aunque si se va a pasar más de un día en la ciudad, la opción más económica (aunque tal vez la menos cómoda) es comprar un abono semanal de Valenbisi. Por 13,30 euros a la semana se pueden coger tantas bicicletas como se deseen en las distintas estaciones que hay repartidas en la ciudad con un tiempo consecutivo de utilización máximo de media hora.

Pero si uno no tiene ganas de pedalear, para visitar el centro de la ciudad o desplazarse desde y hasta la playa las líneas de autobús de la Empresa Municipal de Transporte también son una opción a buen precio. Por ocho euros, se puede disfrutar de diez viajes. En el metro, por 7,20 euros se pueden comprar un bbono con otros 10 viajes para la zona A, que abarca prácticamente toda la ciudad de Valencia.

Algo más «acomodada» es la opción del taxi, que en el caso de una ciudad con las dimensiones de Valencia no es una mala opción. Por poco más de diez euros se puede ir desde el centro hasta la playa o a la Ciudad de las Artes y las Ciencias.

QUÉ VER

Paseos en barca rebajados y visitas guiadas gratuitas

La ciudad de Valencia tiene numerosos atractivos históricos y arquitectónicos que se pueden ver de forma gratuita o a buenos precios. Un ejemplo es el Miguelete, un edificio histórico y símbolo del «cap i casal» al que se puede subir por tan solo 2 euros. Para entrar a cualquier iglesia o catedral, tampoco es necesario pagar, algo que agrada y sorprende especialmente a los turistas europeos, acostumbrados a que en otros países sí que haya que hacerlo.

Pero si más allá de ver, lo que se busca es una visita guiada por especialistas para una estancia corta, coger el autobús turístico de la ciudad tiene un precio bajo en relación con el de ciudades como Madrid (21 euros por día) o Barcelona (27 euros por jornada) y otras capitales europeas. Por 18 euros por persona se puede subir y bajar durante dos días consecutivos y tantas veces como se desee de este vehículo con audioguía que recorre los enclaves más destacados de la ciudad.

Pero si uno prefiere conocer los encantos de Valencia a pie y de una forma «más personal», Free Tour Valencia es una excelente opción. Es un tour guiado por el casco histórico con guías profesionales que muestran los encantos del centro por un «precio libre»: uno hace la reserva y disfruta del tour y, una vez terminado, decide sí quiere pagar o no por la ruta. Las visitas se realizan todos los días de la semana en dos horarios: las diez y media de la mañana y las seis de la tarde. Además, en horario nocturno, un par de empresas organizan rutas guiadas para conocer la singularidad de los Poblados Marítimos, aptas para turistas y vecinos.

DÓNDE COMER

Los turistas buscan variedad gastronómica con precios aptos para todos los bolsillos

La fiebre de la venta de «cupones» a través de páginas web también ha hecho mella entre los turistas. Buena prueba de ello es que empresas como Groupon o Lets Bonus ofrecen numerosas propuestas para probar «la auténtica paella valenciana». Con unos precios que se sitúan entorno a los 15 euros en la orquilla más baja, se puede disfrutar de un plato de arroz. Además, no son pocas las ofertas que acompañan esta comida de un paseo en barca por la Albufera o de trayectos en golondrina por la Marina Real para conocer el puerto de Valencia.

Volviendo a tierra, en el centro de la ciudad se pueden encontrar también menús muy baratos además de los de las clásicas franquicias. Así, por ejemplo, en la Plaza del Ayuntamiento, una cadena ssde supermercados ofrece sándwich y refresco o botella de agua para llevar. Pero si lo que quiere uno es sentarse cómodamente, no muy lejos, en el barrio de Ruzafa menús como los de Piknik ofrecen una completa comida por cinco euros.

Para los que buscan huir de lo más típico, todos los miércoles en e zona del Cedro se organiza la ruta de la tapa: copa de vino o cerveza más tapa por tan sólo 2 euros. No obstante, este tipo de eventos está cogiendo peso y en el último año se han organizado diversas iniciativas de este tipo en el centro de la ciudad.

DÓNDE DORMIR

Aumentan los apartamentos

Con la llegada de la crisis, el alquiler de apartamentos y habitaciones privadas ha ido cogiendo cada vez más fuerza para desgracia de las cadenas hoteleras que, precisamente, denuncian que los bajos precios de los apartamentos ilegales son los culpables de este turismo de bajo coste. A partir de 20 euros la noche por persona pueden alquilar habitaciones y pisos enteros en casi cualquier zona de la ciudad, para desgracia, muchas veces, de los vecinos.

Pero los hostels, albergues ubicados dentro de la ciudad pero reconvertidos al lenguaje moderno, son sin duda la opción más barata y prácticamente solo apta para jóvenes y mochileros. Por 10 euros la noche uno puede disfrutar de una cama en una habitación compartida con conocidos y desconocidos. Quienes recurren a ellos son en su mayoría grupos de jóvenes que vienen a pasar unos días a la ciudad con presupuesto reducido y ganas de conocer a gente nueva.

Recurrir a hoteles y pensiones sube el precio de la estancia pero a partir de 30 euros se pueden encontrar las habitaciones más baratas de la ciudad.

Compartir el artículo

stats