Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Testimonios

Entre dos tierras

El Baix Maestrat y els Ports son las comarcas valencianas que limitan con el Montsià, Cataluña - Robert, Lorena, Rigo, Álex y Rosana explican a Levante-EMV cómo es la relación entre los pueblos, que tras las elecciones de hoy pueden ver su convivencia alterada

Entre dos tierras

Robert Sans, de Ulldecona (Tarragona), trabaja en Vinaròs (Castelló) y ha residido en la ciudad del Baix Maestrat durante muchos años, al igual que en Valencia o Tarragona. Ha trabajado como operador técnico en Canal 9, y también para productoras de Valencia, Madrid o Barcelona. Durante el último año, entre otros trabajos, ha recorrido el mundo como cámara del campeonato mundial de motociclismo. En estos momentos tiene su oficina en Vinaròs, desde donde no para de viajar.

Preguntado por «el tema» lo tiene claro: «que dejen votar a la gente y que los partidos paren de utilizarlo para la confrontación política». El cámara considera que «hay problemas más importantes que resolver en sanidad, educación o servicios sociales».

Robert no se imagina una frontera en la carretera que comunica Vinaròs con Ulldecona. «Els Ports, el Matarrarranya, el Maestrat o el Montsià de Tarragona son casi como una provincia; a caballo entre Castelló, Teruel y Tarragona, estamos alejados de los grandes centros administrativos y eso nos une en usos lingüísticos, costumbres, modo de entendernos...».

Ve «lejos» una hipotética independencia de Cataluña y considera que si los ciudadanos pudiesen decidir «evitaríamos mucha controversia y enfrentamientos que no existen en el día a día».

Considera que no debe establecerse una frontera en el río Sénia «pero sí que se deje a la gente opinar y que no todo se enroque en el debate político e identitario. Soy partidario de defender y respetar la cultura, la lengua, la tradición y las costumbres propias, y de tener los mismos derechos que otras zonas, creo que es algo evidente».

No confiesa abiertamente si es independentista o no, aunque asegura que «el enquistamiento» ha radicalizado posiciones en Cataluña y en Madrid. «Si desde un principio todos hubiesen dialogado por el interés general, no se hubiese llegado a esta situación. Apunta que si hubiesen permitido un referéndum como en Escocia, no habría la situación actual, por lo que cree que «determinados políticos catalanes lo han hecho mal, y también desde Madrid». Asegura que, como ocurre en Castelló, la gente siente agravios en temas como el pago de las autopistas.

Ulldecona está a escasos kilómetros de Sant Rafel del Riu, al otro lado del río Sénia, por lo que la relación entre los pueblos de Castelló y Tarragona es estrecha. «He trabajado como cámara de televisión en Morella, Vinaròs y Tortosa y con todos estos lugares me siento identificado», y asegura que conserva amigos, compañeros y «buenos momentos en todos los sitios».

Para Robert Sans la clase política debe trabajar para mejorar la vida de los ciudadanos. «Si tenemos más cerca un hospital en Castelló no tiene sentido que vayamos a Tarragona, y a la inversa» comenta, a la vez que ya está pensando en su próximo trabajo, no sabe si en Castelló, Tarragona o en el gran premio de Indonesia.

Rosana es una vinarocense que trabaja en Ulldecona y cruza a diario la frontera para asistir a su trabajo. En territorio catalán tiene amigos y compañeros de trabajo, y afirma que no tiene ninguna sensación especial ente el 27-S. «Reconozco su derecho a decidir, aunque espero que no me reporte ningún perjuicio laboral ni económico».

Entre los dos lados del río

Rigo Queralt es un vecino de Vinaròs, natural de Alcanar (Tarragona), y que todos los días cruza el río Sénia, frontera administrativa entre la Comunitat Valenciana y Cataluña.

Casado con una vinarocense y padre de dos hijos, vive en la localidad desde hace 23 años, y tiene al resto de su familia en Alcanar, municipio vecino a la capital del Baix Maestrat. Además, comparte empresas a un lado y otro del Sénia.

Queralt está convencido de que «después de las elecciones catalanas seguiremos cruzando el río Sénia, no notaremos ningún cambio». Para este vecino, las únicas fronteras son las administrativas, «no tenemos, no las he visto y creo que nunca las veré».

La relación entre los vecinos de los pueblos de la zona, «es la de siempre, cordial, unos vienen aquí, otros van a Alcanar, Ulldecona u otro pueblo catalán, como municipios vecinos y amigos que somos». Y es que para Queralt «nunca ha habido una sensación de que tú eres de aquí y yo de allí, somos todos del mismo territorio, del Sénia, del Maestrat». Se da la circunstancia que numerosas fincas agrícolas del término municipal de Vinaròs son propiedad de vecinos de Alcanar, lo que aún enlaza más los vinculos, así como que hay muchas personas de ambas poblaciones que han marchado a vivir a la otra.

Así pues, este vecino no nota que cambia de una autonomía a otra, pero sí destaca el sentimiento catalán que hay en Alcanar, «como no pude ser de otra manera». Asimismo, critica el abandono en infraestructuras que padece tanto el sur de Calatuña como el norte de Castelló, «las comunicaciones entre ambas autonomías son muy deficientes». Queralt reconoce que existe una sensibilidad especial ante las elecciones de hoy, al igual que en el resto del país, «aunque en Vinaròs más al estar junto a Cataluña».

Por otro lado, Álex Torres nació en Vila-real aunque está muy vinculado a la ciudad de Benicarló, en la que ha vivido largas temporadas. Es maestro de primaria y trabaja para el Departament d´Educació de la Generalitat de Catalunya desde hace ocho cursos escolares. Su trabajo se desarrolla en un colegio de la Aldea, al otro lado del río Sénia, lo que le ha permitido mantener una «estrecha relación» con la gente del entorno.

«Siempre me he sentido bien acogido, tengo muchos conocidos y algunos amigos catalanes», puntualiza. Respecto a 27-S, Álex opina que aunque «no servirán en gran manera para conseguir la independencia», encuentra «muy positivo que la gente pueda decidir qué es lo que desea para su territorio». Aunque este profesor también opina que algunos políticos «utilizan el 27-S para intereses partidistas y en ocasiones intentan confundir a la personas con el concepto de libertad como pueblo para poder esconder sus incompetencias políticas».

Compartir el artículo

stats