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Camarón que se duerme

El término innovación roza hoy la frivolidad. ¡Todo es innovador!, y se une a «novedad» o «renovación». A mí me gusta unirlo a la generación de valor o como una estrategia de adaptación que tienen las personas y organizaciones para tomar la pendiente de crecimiento del cambio que genera constantemente la globalización. La innovación pues, es un acto por el cual una persona cambia la forma de hacer las cosas para adecuarse a los cambios en la demanda de los sujetos a los cuales les otorga resultados, o bien, incluso para sí mismo. Por ello es necesario que todos los profesionales y no sólo los empresarios busquen nuevas y mejores formas de hacer su trabajo, eso dará una señal al mercado de que uno se está actualizando constantemente. Para innovar bien, como todo en la vida, hay que informarse, formarse y asesorarse. Florida Universitària organiza el próximo 30 de Septiembre a las 18.30 horas, la sesión de presentación de su Máster Oficial en Innovación y Dirección de Proyectos de Negocio. Una sesión en la que se reflexionará sobre ¿por qué seguimos usando herramientas de definición de nuestros modelos de negocio creadas hace décadas y pensadas para entornos radicalmente diferentes a los actuales?. Y donde se analizarán las técnicas para definir modelos de negocio en entornos de extrema incertidumbre en los que deben tomarse decisiones de manera ágil, pivotar para alcanzar nuestros objetivos y poner en mercado productos o servicios basados en la innovación en valor. La conferencia invitada correrá a cargo de José Antonio de Miguel, Presidente de la Asociación para el Fomento de la Innovación y Cultura Emprendedora (AFICE). De Miguel considera que «hoy, la incertidumbre, el impacto de las tecnologías y la globalización entre otros factores han hecho que la definición de los modelos de negocio sea un proceso heurístico en el que el emprendedor no cuenta con toda la información necesaria para la toma de decisiones y, por tanto, éstas se toman a partir de fragmentos de una situación. Partiendo de la premisa de que inicialmente una idea, un diseño de modelo de negocio no es más que un conjunto de hipótesis, llegamos a la conclusión de que lo más importante es validarlas o invalidarlas a través de la iteración con los que pensamos que van a ser nuestros clientes lo antes posible». A esto él lo llama «fracasa rápido, fracasa barato», es decir, fracasa en «modo hipótesis» antes de haber malgastado tiempo y recursos intentando construir soluciones, productos o servicios que no le interesen a nadie. Ahora, pregúntese usted, ¿qué está haciendo diferente que su competencia? ¿Acaso busca innovar cotidianamente en su trabajo? ¿Su zona de confort lo mantiene contento o conforme? Si su respuesta a cualquiera de estas preguntas es negativa, es hora de hacer algo. Deténgase un momento a analizar las tendencias del mercado y busque estar un paso delante de los demás. Que no se lo lleve la corriente como a aquel famoso camarón.

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