Sandra Deltell lleva más de medio año al frente de la oficina de Pricewaterhouse Coopers en la Comunitat Valenciana y Murcia, por lo que ya ha podido aterrizar y empezar a imprimir su sello en la multinacional. Aunque esta alcoyana licenciada en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universitat d'Alacant no es nueva en la casa. De hecho, es un ejemplo de las posibilidades de crecimiento profesional y personal de la consultora. Deltell entró en la firma internacional a los 22 años y desde ahí, ha pasado por todos los niveles de responsabilidad hasta convertirse, primero en socia, y desde julio del pasado año en socia-directora. La única mujer en un puesto de semejante relevancia de todos los bufetes y auditoras valencianas.
Deltell es especialista en auditoría de empresas, marca de la casa en la delegación de «Price» en la Comunitat Valenciana. Una prueba es que su antecesor en el puesto y mentor, Rafael Sanmartín, asumió el cargo de socio responsable de la división de Auditoría para España. En las oficinas de la consultora, frente al Palau de la Música de Valencia, su llegada a la coordinación del equipo ha sido celebrada. De hecho, en su filosofía directiva se encuentra la idea de que, para gestionar equipos, hay que conocer a las personas en profundidad.
Al ser preguntada si para la dirección de una firma es mejor un directivo de la casa o un fichaje estrella, lo tiene claro. «Estas firmas requieren un conocimiento del funcionamiento del mercado y de la casa, porque somos una firma de personas», argumenta, al tiempo que recuerda que para tener una visión estratégica puede ser positivo un fichaje externo. «Es importante una visión externa que te ayude al análisis estratégico, pero el día a día lo debe gestionar alguien que conozca a sus empleados y los problemas que tienen. Si no gestionas bien el equipo pierdes talento y generas frustración», afirma.
El objetivo de crecimiento de su delegación respecto a 2015 es de entre el 3 % y el 5 %. «Hemos sido muy prudentes; trabajamos con una ambición mayor pero hemos querido ser conservadores en las previsiones», asegura. «La idea es continuar creciendo en todas nuestras líneas de servicio: auditoría, asesoramiento jurídico, consultoría de negocio y transacciones. Mi objetivo es continuar generando confianza en el mercado. Tenemos un modelo de negocio muy equilibrado y en nuestra área geográfica estamos bien posicionados», explica la directiva.
El cambio de Gobierno en las administraciones valencianas ha traído también un cambio en la relación de la Generalitat con los despachos y consultoras. Pese a esta presumible caída de negocio en el cliente público, Deltell se muestra conciliadora: «Nos ofrecemos a las administraciones para ser canales de aceleración de proyectos, aunque el actual Consell prefiera utilizar sus recursos. Nosotros nos hemos propuesto para ayudar».
Respecto a la situación económica de la Comunitat Valenciana se muestra bastante optimista en sus previsiones de 2016. «Se están produciendo muchas transacciones en la autonomía y muchas empresas valencianas están invirtiendo en el exterior», revela. «Estamos asesorando mucho en internacionalización y en planes estratégicos de las empresas. Estamos trabajando en procesos de reestructuración de las compañías a su negocio original. Las empresas se han dejado de aventuras y se están focalizando en lo que saben hacer», explica. Para esta ejecutiva valenciana, «a nivel nacional, EE UU, México, Brasil y Alemania son los países donde más oportunidades hay. Para las valencianas prima Europa y el norte de África».
Cuotas para «acelerar los cambios»
Su faceta de directiva no se desliga de su vertiente más comprometida, de su lucha por la conciliación laboral y la igualdad entre hombres y mujeres. De hecho, no se esconde, es tesorera de la asociación de mujeres directivas y empresarias EVAP, y dice sin tapujos lo que piensa. «A título personal, soy partidaria total de las cuotas porque son una herramienta necesaria para el equilibrio en instituciones que están totalmente desequilibradas», defiende. Para Deltell, «se ha demostrado en países que la han implementado, como Suecia o Noruega, donde los porcentajes de igualdad que tienen actualmente son altísimos y estoy segura de que no producen daño a la sociedad empresarial. Todo lo contrario». La directiva sabe que los procesos de cambio en igualdad son a largo plazo, por lo que las cuotas se convierten «en un acelerador». «Hay más mujeres tituladas y estamos presentes en la totalidad de estamentos y grupos de interés, pero eso no se refleja en la dirección. Cuando haya un equilibrio tendrán que desaparecer», propone.
Deltell también reconoce que, aunque poco, algo se ha avanzado en la sociedad española: «Cada vez hay una mayor preocupación porque existe esta diversidad en los puestos de dirección. Hay más interés en la patronal», expone. Pero recuerda: «Hay una gran cantidad de empresas que no tienen ni una mujer en sus consejos de administración. La diversidad del talento del equipo directivo es básico». Esta directiva cree que pese a la crisis «no creo que hayamos ido para atrás» en conciliación laboral y familiar: «Los problemas son estructurales de la organización empresarial. Está muy presente en firmas que se crearon hace 40 años. Se deben impulsar planes de igualdad», recomienda, mientras recuerda que hay que seguir trabajando porque «todavía queda mucho por hacer».
