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Desayunos Banco Sabadell

El turismo de congresos, de la competencia a la colaboración

El turismo de congresos, de la competencia a la colaboración

El turismo de congresos es una de las ramas del sector que más perjudicada se ha visto durante la crisis. La caída de la actividad de las empresas ha repercutido de forma negativa en el negocio. A ello se suma la competencia «ruinosa» de precios entre los recintos (Feria, Palacio, Cacsa) para captar reuniones; la proliferación de palacios de congresos en toda España que han desviado negocio a coste cero o la hipoteca reputacional por una inversión pública considerable vista como un exceso en tiempos de crisis. Con el propósito de reflexionar sobre el modelo y sus retos, El Mercantil Valenciano y el Banco Sabadell organizaron el miércoles un desayuno coloquio en el que representantes de los recintos, la administración y la empresa privada debatieron sobre el presente y futuro. El director de Turismo Valencia, Antoni Bernabé, realizó una intervención inicial para exponer la situación.

La administración: un nuevo rol «facilitador»

ANTONI BERNABÉ

Estamos ante un tema clave. En la C. Valenciana si hay un sector con fortaleza durante la crisis ha sido el turismo. Y no ha sido ajeno a la crisis, especialmente el de congresos, muy vinculado a la situación económica del país. Las empresas han recortado el presupuestos para esta actividad. Han exigido precios muy ajustados y ha habido una reducción importante de la rentabilidad. En la ciudad de Valencia, a pesar de crecer en turistas, la rentabilidad de las empresas se ha reducido notablemente.

Estamos en un momento de recuperación. En 2015 los resultados han sido positivos. Y en turismo de reuniones, también. Somos el tercer país en el ránking de turismo y también tercero en reuniones (por detrás de EE UU y Alemania) y sube a la segunda plaza en número de participantes (sólo por detrás de EE UU). Dentro de España, Valencia está en la tercera posición. Madrid y Barcelona ocupan los primeros lugares. Valencia está bastante por detrás. En el escenario internacional bajamos posiciones: 45º de Europa (17º si quitamos las capitales) y 81º del mundo (36º sin capitales). Es una actividad de alta rentabilidad. El gasto puede multiplicar hasta por cuatro respecto a la media. Hay previsiones de crecimiento en tamaño e ingresos.

¿Qué hacemos como ciudad? Hay retos por delante. Estamos bien conectados. Mejoramos este año con 400.000 plazas nuevas de avión a destinos internacionales. KLM, Lufthansa o British (compañías de bandera) han llegado y ayudarán. Tenemos buenos equipamientos e infraestructuras. Y algo muy importante: tenemos que ser ´facilitadores´. Que quien quiera organizar un congreso obtenga apoyo de la administración (espacios, permisos para utilizar espacios singulares). Valencia no ha puesto facilidades generalmente para montar eventos cuando se salen de espacios destinados a ellos.

Tenemos que sumar esfuerzos. Ha habido mucha dispersión de esfuerzos y cada sede ha tenido una estrategia dispar. Hace falta una estrategia colaborativa. Ya nos hemos puesto a trabajar con las sedes en un modelo de negocio y gestión único, con una web, un dossier y una acción de marketing más eficaz e innovadora.

Muchos recintos pero «complementarios»

SYLVIA ANDRÉS

Valencia está muy bien posicionada. Es lógico: somos la tercera ciudad de España. Que España esté tercera en el ránking es por el clima y la gastronomía (alto nivel y buen precio) y por hoteles competitivos. A nivel nacional la competencia es muy dura. El cuarto está mucho más lejos que cuando el Palacio empezó la actividad. Valencia se ha mantenido en el lugar que le corresponde. A nivel nacional, en 1998 había 33 palacios; hoy son 85. Todos creen que por tener palacios la ciudad va a crecer. Hay recintos en Ávila, Cáceres, Vigo. Está sobredimensionado. Hay que llenarlos y surge esa competencia de ciudades que pagan para que vayan eventos. Apoyamos la nueva tendencia de estar todos en una misma mesa. Tenemos que especializarnos y dar imagen de unidad. Profesionalidad y unidad.

ENRIQUE VIDAL

Bernabé nos llamó para trabajar en una oferta única y le dijimos que sí. Tenemos un elemento negativo: el coste reputacional. Superarlo es un trabajo lento y titánico. Lo bueno es que solo se ve en el mercado doméstico. Internacionalmente, está comprobado que somos un gran destino europeo. También tenemos una misión social: ahí está la Exposició del Ninot. Tiene un coste pero estamos encantados porque nos trae gente. Vemos a la Feria y el Palacio como colaboradores. No somos capaces de vender nuestro productos sin la colaboración de todos. Estamos encantados de colaborar.

ENRIQUE SOTO

Cierto que en el negocio congresual hemos superado la fase más dura que empezó en 2008. Sí hay secuelas de la crisis que urge superar: el coste reputacional y los precios, que han degradado la competencia. Todos los recintos de la época de expansión fueron usados como símbolo del éxito económico. Tras la crisis el discurso ha cambiado. Donde éramos símbolo del éxito ahora se habla de despilfarro y excesos. Es injusto. El descrédito del continente se traslada al contenido. Se nos critica que la actividad no cubra los costes del recinto. Se olvida que la Feria genera impactos directos, indirectos e inducidos que hay que tener en cuenta a la hora de valorar la rentabilidad de la inversión.

En cuanto al precio, estos años ha habido una competencia ruinosa. Se produce cuando hay capacidades excedentes: se bajan precios para seguir vendiendo. Ha habido una competencia absurda también en Valencia. Todos hemos presupuestado por un evento y visto cómo se iba a otro lugar de la ciudad por mucho menos coste o sin coste. No es bueno, degradamos la ciudad como destino.

ROCÍO CIBRÁN

Es una muy buena iniciativa poder reunirnos. Pero desde el sector privado se ve diferente: el 95% de los congresos se relacionan con la medicina y la farmacia. No vemos nada de eso [por código ético, las farmacéuticas no pagan a congresistas hoteles de lujo]. El Westin fue comprado hace dos años. Hemos reducido tanto el precio que como no se puede mermar la calidad hemos entrado en pérdidas. ¡Os pido a gritos potenciar la ciudad! Llevo en Valencia menos de un año. Nunca he vivido en la península. Al llegar, todos los grupos europeos y americanos alucinan con el potencial de Valencia y lo mal que lo estamos vendiendo. Hay un aspecto cultural, tecnológico y musical que no estamos potenciando. En clima en Europa solo nos supera Canarias. Hemos subido en número de turistas pero por la desgracia de otros países. Lo digo siempre en Canarias: no nos durmamos porque Dubai y Omán están ahí al lado. Cuando esa situación mejore, si no trabajamos quizá nos llevemos una sorpresa. La conexión aérea es el gran reto que tenemos. Alicante no es una opción: está a dos horas y no van a venir congresos por Alicante. Aplaudo el énfasis de los nuevos gobernantes. He tenido mis problemas pero he conseguido obtener lo que necesitaba. Me parece increíble haber estado a punto de perder el lanzamiento mundial de un coche por un permiso de aparcamiento.

El ejemplo de Barcelona

JOSEVI PLAZA

La gestión colaborativa ha sido un escándalo en esta ciudad. Personas con los mismos intereses ni se hablaban ni venían a los actos. Ni la Generalitat ni el ayuntamiento. Menos mal que había buenos equipos que decían: «Esto se ha de sacar». Hemos tenido muchas faltas debido a la competencia de contenedores institucionales.

JAIME MATAS

Se ha hecho lo más difícil: tener unos contenedores con una inversión importante, si bien es cierto que el coste reputacional está ahí. No entiendo que no sepamos tener claro el modelo de negocios. No solo se atrae congresos, es experiencia-cliente. No entiendo que con este esfuerzo no seamos capaces de ponernos de acuerdo con lo que hay que hacer. Otras ciudades han persistido con un modelo de negocio y se conocen en todo el mundo.

SYLVIA ANDRÉS

El peor enemigo del valenciano es el propio valenciano. Tenemos que especializarnos cada recinto y acompañar a nuestro compañero de viaje porque se trata de que todos podamos funcionar. Tenemos que aprender de los errores del pasado y construir juntos porque ya hemos demostrado que la fórmula anterior no funciona.

ANTONI BERNABÉ

He compartido el diagnóstico de Rocío Cibrán los últimos años, pero me pongo en clave de oportunidades. Tenemos todos los mimbres para hacer un destino de éxito si lo hacemos bien. El problema es cómo se ha gestionado esto si nos comparamos con Barcelona, que ha trabajado el modelo y ha tenido resultados de éxito. Aquí se ha trabajado en la promoción pero el producto no está bien estructurado. Hay una gran oferta cultural pero no está estructurada para llevar la los mercados. No hay una web para localizaciones de cine, con los documentos para gestionar los permisos. Todo eso está sin articular y ocurre producto a producto. No hay que inventar: hay que copiar a los que lo hacen bien y el ejemplo de Barcelona es el de más éxito.

ENRIQUE SOTO

Es importante que el sector nos lo creamos. En los años malos Barcelona ha tenido grandes ayudas por parte de la administración. El Mobile World Congress supone una inversión. Es importante recuperar ese discurso que parece olvidado. El peligro es caer en la irrelevancia. Necesitamos que las administraciones se lo crean y actúen de facilitador. La crisis ha demostrado la dependencia del mercado ferial español del mercado interior. Para ser competitivo hay que buscar el mercado internacional.

JOSEVI PLAZA

Para nuestra reputación se debe hacer una campaña de orgullo. Hay un tema de concienciación. Hay un cobranding del que no hemos hablado: la música, la pólvora, están adscritos a nuestra marca. Hay que empujar en el sentido creativo.

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