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Velando por el sueño de los demás desde la cuna

Velando por el sueño de los demás desde la cuna

Mónica Duart despertó al mundo en una fábrica. Podría decirse que fue una infancia mullida, criada entre colchones en la empresa que su padre puso en marcha en 1966, hace justo medio siglo. Lo que comenzó siendo una fábrica en Alginet impulsada por Enrique Duart Peris es hoy el Grupo Dupen: casi una decena de empresas dedicada a los sistemas de descanso (colchones, literas, somieres, camas, etc) pero también con ramificaciones en la decoración de interiores. 200 empleados y 55.000 metros de superficie industrial en la localidad de la Ribera.

Dormitienda, la enseña a pie de calle del grupo dedicado a la fabricación y distribución de colchones, tiene al frente a Mónica Duart, una de las hijas del jefe. La familia de Benifaió ha colocado a cada uno de los tres miembros de la segunda generación al frente de una rama del negocio.

Mónica Duart, licenciada en ADE, máster MBA y joven empresaria del año hace un tiempo, no olvida, sin embargo, los valores tradicionales asociados a la empresa. «Los empleados nos han visto nacer. Pasábamos allí los veranos, jugando y triturando papel, haciendo carreras subidos a la fenwick con los trabajadores», evoca. A los 43 años, la directora general de Dormitienda trata de transmitir aquella cultura a la tercera generación. «Tengo dos hijos, cada dos meses pasan la mañana allí. Quiero que conozcan la gente con la que trabajo, que valoren lo que hacen sus padres».

¿Con qué sueña alguien que se dedica a fabricar y vender colchones? «Estoy contenta, he conseguido conciliar y era un objetivo que tenía. Quiero que mis hijos sean felices y sean adultos independientes y con capacidad de elección. A mi padre le encantaría que alguno se dedicase al negocio; yo prefiero que hagan lo que quieran. Si tienen madera de empresario les apoyaré, pero no voy a influir de ningún modo respecto a la empresa». Este año, confiesa, han descubierto la ofrenda a la Mare de Déu: «Mi hija es muy fallera, nos hemos vestido los cuatro. Y voy a repetir».

1996: de fabricantes a vendedores

El concepto Dormitienda surgió en uno de los viajes al extranjero del patriarca de la saga. Básicamente, se trataba de controlar de principio a fin la cadena comercial, saltarse el canal de distribución para ser más competitivos. Ya han pasado veinte años de la primera tienda en la calle José Capuz, que continúa abierta. Hoy hay 65 en toda España „quince franquicias; el resto propias„ y la previsión pasa por seguir copando mercados.

No han sido unos años fáciles. La crisis ha barrido muchas de las nuevas colchonerías que surgieron como setas en las arterias comerciales. «Nos preparamos muy bien para la crisis. Hemos reducido los márgenes. Afortunadamente, la empresa se ha mantenido bien, con mucho esfuerzo y menos margen. Hemos tenido que ser muy competitivos. Me encanta la competencia, te obliga a estar siempre alerta, a innovar, a esforzarte mucho más». La cadena de tiendes facturó diez millones el pasado año.

En medio de la gestión de las tiendas, la puesta en marcha de un nuevo concepto de punto de venta orientado a los productos de lujo, y la conciliación de la vida laboral y familiar, Mónica Duart saca tiempo para cultivar el cuerpo y la mente. Con aire oriental. «Soy una apasionada de la lectura. Me gusta la novela negra. Y leo a Murakami y otros japoneses», señala. Y también saca tiempo para la gimnasia. «He descubierto el deporte. Hago rutinas japonesas, entrenamiento de alta intensidad varias veces a la semana».

La jefa de la venta de camas no descansa.

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