La startup de viajes sorpresa Waynabox acaba de cerrar una ronda de financiación de 1,2 millones de euros para afrontar su internacionalización. La compañía, nacida en Valencia hace un año y medio con el apoyo de Lanzadera, va a abrir una filial en septiembre en Francia que replica el modelo que ha implantado con éxito en España y con el que ha facturado más de dos millones de euros tras vender 15.000 escapadas de fin de semana a un precio medio de 150 euros por persona. Los paquetes incluyen vuelo y dos noches de estancia a destinos europeos y del norte de África. La particularidad del producto que ofrece Waynabox es que los usuarios desconocen hasta dos días antes el destino de su escapada, que la startup selecciona según la disponibilidad y las ofertas entre una horquilla de doce. Los usuarios de Waynabox que quieren evitar el riesgo de repetir un destino pueden eliminar una ciudad gratuitamente, y hasta nueve por un suplemento de cinco euros por cada descarte.

En la ronda de financiación que acaba de cerrar la compañía han entrado empresas y fondos de peso como JME Venture Capital, Bankinter Capital Riesgo (a través del programa de emprendedores de la Fundación Innovación Bankinter), Grupo Palladium, Grupo Marjal y Media Digital Ventures. Pau Sendra, cofundador y CEO de Waynabox, explicó que cada fin de semana venden quinientos viajes con vuelos que salen desde Madrid, Barcelona y Málaga. A pesar de sus orígenes valencianos, la startup no ofrece todavía la posibilidad de volar desde Manises o El Altet porque no hay suficiente oferta de vuelos. «Queremos ofrecer el servicio desde Valencia, pero es complicado por los horarios. Nosotros necesitamos aeropuertos con muchas conexiones. Ofrecemos doce destinos y tienen que estar los doce disponibles. Si Valencia solo tiene siete es complicado de cuadrar, aunque lo seguimos intentando». La firma, que va variando los doce destinos posibles, ofrece la posibilidad de viajar a París, Lyon, Marsella, Niza, Milán, Roma, Turín, Gran Canaria, Tenerife, Tánger, Bruselas, Hamburgo, Colonia, Frankfurt, Berlín, Amsterdam, Dusseldorf, Budapest, Bucarest, Copenhague, Oslo, Estocolmo, Dublín, Londres, Manchester, Liverpool, Birmingham, Malta, Lisboa, Oporto, Múnich. Rotterdam, Ginebra, Nantes, Pisa, Varsovia y Vilna. «Los destinos cambian constantemente. Ahora hemos introducido Viena y Dubrovnik», precisó Pau Sendra.

La empresa entró en la segunda edición del programa Lanzadera en otoño de 2014 y salió al mercado en marzo de 2015 coincidiendo con la edición del Mobile World Congress 2015. En Lanzadera la compañía cimentó su estructura empresarial, fijó su plan de desarrollo e inició su primer plan de operación. «Lanzadera creyó en nosotros desde el principio. Los primeros seis meses fueron de experimentar», aseguró el CEO de la compañía. La startup cerró en junio de 2015 una primera ronda de financiación de 250.000 euros en la que entraron la valenciana BigBan Shuttle Funding, Across Business Partners, Beat Inversiones, Energy Inversiones, Leo Chamarro y Cerycer Inversiones, que ahora han vuelto a acompañar la firma en la segunda ronda.

3,5 millones de facturación

El responsable de la compañía apuntó que su objetivo es cerrar el año con 3,5 millones de euros de facturación y sentar las bases de su internacionalización. «El primer paso es entrar en septiembre en Francia», apuntó Sendra. «Después del lanzamiento y una primera fase de crecimiento, esta nueva ronda de inversión es el impulso necesario para que la compañía pueda consolidarse en España y seguir creciendo hacia otros países europeos», añadió. Waynabox espera ahora la aprobación de financiación pública adicional, que hará ascender la última ronda de inversión hasta los dos millones de euros.