a Comisión de Medio Ambiente que ha emitido el informe desfavorable sobre Puerto Mediterráneo hace unas consideraciones sobre el empleo que podría generar el proyecto comercial y de ocio de Paterna. Los técnicos afean a los promotores que en su estudio de sostenibilidad ambiental no efectúan ni un análisis ni una valoración de la incidencia en el empleo ni de la evolución a medio y largo plazo.
No contentos con el «puro» a los inversores por no incluir en su informe de sostenibilidad ambiental (!) esta información, los técnicos de la Generalitat decidieron hacer el suyo. En seis párrafos de cinco líneas cada uno aseguran, sin aportar ningún dato y sólo con la cita de un informe sin identificar del Gobierno vasco, que existe «al menos un grado de incertidumbre elevado en que el balance del empleo sea positivo, a medio y largo plazo a escala metropolitana de Valencia». De un rigor demoledor.
Es curioso que en parámetros económicos se utilice el término «incertidumbre» como un argumento para desacreditar una opción. La incertidumbre en los negocios siempre está presente. ¿O es que alguien puede atreverse a decir que Ford, que este mes cumple su cuarenta aniversario en Almussafes, va a mantener el empleo a largo plazo? Ni a tres años vista! Cosas de la economía globalizada.
No menos llamativo para oponerse a la llegada de Puerto Mediterráneo son las sombras de sospecha sobre la calidad del empleo. Según sus detractores, entre los que se anotan altos cargos del Consell, el centro comercial y de ocio creará unos puestos de trabajo precarios nada acordes con la idiosincrasia del pueblo valenciano. Entiendo que cuando se habla de precariedad se están refiriendo a salarios bajos.
¿Cuánto cobra cada uno de los casi mil mozos de almacén que trabajan en la planta de Tempe (la zapatería de Inditex) de Elx? Pues 16.000 euros brutos al año. Lo que marca el convenio del comercio y el zapato! Por cierto, el mismo al que se acogerían parte de los empleados de Puerto Mediterráneo. En la capital del Baix Vinalopó ya ha habido manifestaciones contra los bajos sueldos que paga la filial de la multinacional de moda.
Para el Consell, estos trabajos en Tempe sí que son de calidad a tenor de las facilidades que ponen para la ampliación de sus instalaciones en el polígono de Torrellano. De momento, el ayuntamiento de Elx ya ha comprado suelo público para agilizar el desarrollo urbanístico (para que no haya mucha especulación, vamos). Y la Generalitat ha lanzado un plan parcial que será tramitado por vía de urgencia y que podría estar aprobado a principios de 2018. En año y medio listo.
Tempe ha recibido la bendición del Consell, Puerto Mediterráeo la condena. Deberían recapacitar en el Gobierno valenciano sobre la situación y tratar de no dejar escapar este proyecto europeo. No hay tantos haciendo cola para invertir su dinero.
