En España hay nueve millones de viviendas con garaje y casi un millón de plazas de aparcamientos públicos en hoteles y parkings que están una gran parte del tiempo vacías. La startup valenciana Peer to park ha encontrado un nicho de negocio y ha llegado a acuerdos con particulares, hoteles y estacionamientos públicos para sacar el máximo rendimiento a las plazas. A través de la web y de una aplicación móvil conecta a propietarios con conductores que buscan una plaza de aparcamiento por horas o por días. Los usuarios consiguen descuentos de un setenta por ciento de media y los propietarios logran rentabilizar sus plazas de garaje. El fundador y CEO de la compañía, Roberto Acevedo, asegura que ya disponen de 11.500 usuarios en Madrid, Barcelona y Valencia, y en dos meses confían en doblar el número de plazas disponibles con los acuerdos que están negociando con hoteles y parkings públicos. «Nuestro modelo está basado en el consumo colaborativo. Queremos ser el Airbnb o el Blablacar de los aparcamientos.

La compañía nació en verano de 2015 y ha depurado su modelo de negocio en la aceleradora valenciana Bbooster. Acevedo comenzó a madurar la idea después de que la grúa se llevara su coche mientras asistía a una conferencia en el centro de Valencia. «Yo estaba metido en otra startup y fui a una charla de los responsables de Airbnb en el Ateneo Mercantil. Al salir, vi que la grúa se había llevado mi coche y tras pagar 150 euros comencé a pensar en lo que había aprendido en la conferencia de Airbnb de alquiler de viviendas por días», aseguró Acevedo. El emprendedor rastreó en la web y descubrió que en Inglaterra hay una aplicación que se llama JustPark y que también ofrece aparcamientos con un ahorro del 70 %. «Comprobé que los particulares estaban dispuestos a ceder sus aparcamientos por días y comencé a trabajar en el proyecto», añadió el CEO de Peer to park.

Con la ayuda de Bbooster, los responsables de la startup abrieron dos líneas de negocio. La primera es con acuerdos con propietarios de plazas de garaje en comunidades de vecinos de las tres grandes capitales españolas. Este modelo de negocio está sobre todo enfocado al alquiler por días a turistas, y el propietario y el cliente son los que se ponen de acuerdo en la tarifa a pagar. La plataforma cobra un 19 % del alquiler, del que un 15 % se hace cargo el conductor y el otro 4 % el propietario. La segunda línea de negocio se basa en los acuerdos con hoteles y aparcamiento público para que saquen la máxima rentabilidad a sus plazas ofreciéndolas a un precio menor que el de mercado. En este caso, la compañía cobra un porcentaje a las empresas, que es confidencial.

La firma ha llegado acuerdos en Valencia con el hotel Barceló (que dispone de 150 plazas en la avenida de Francia), y en Barcelona con las cadenas NH y Núñez y Navarro. «Las empresas están muy interesadas porque pueden llegar a tener más del cincuenta por ciento de sus plazas vacías y así les sacan una rentabilidad», destacó Roberto Acevedo. El responsable de la empresa emergente incidió en que quieren potenciar esta línea de negocio porque les permite un crecimiento mucho más rápido.

En Valencia hubo otra startup parecida que se llamaba Apparcando y que no despegó por las dificultades que tiene alcanzar acuerdos con los particulares. Además, la tecnología de Apparcando implicaba la instalación de un receptor en la puerta de los garajes comunitarios para que se pudiera abrir la puerta desde el teléfono móvil del usuario. «En nuestro caso no instalamos ningún dispositivo. Los particulares que alquilan su plaza le dejan el mando a distancia del garaje al usuario. Suelen ser alquileres de tres o cuatro días enfocados a turistas. Es sobre todo para medias estancias. Un alquiler de este tipo puede rondar los 30 euros por tres días en Madrid. En el caso de los aparcamientos públicos, los alquileres son por horas», precisó Acevedo.