Hoy no dejamos de escuchar la importancia de la atracción y desarrollo del talento en las organizaciones. Pero recientemente un estudio de M. Mankins y la Unidad de Inteligencia de The Economist ha contrastado que en las empresas de más éxito y crecimiento no tienen más talento que el resto, lo que si lo tienen es mejor talento distribuido en áreas clave de decisión en las empresas e instituciones.

Analizando la productividad de la fuerza de trabajo y después de estudiar las prácticas de empresas globales y de encuestar a altos ejecutivos, descubre que las mejores empresas tienen más o menos el mismo porcentaje de talento estrella que las demás, ni más ni menos. Así que resulta que lo que separa a las empresas de mayor rendimiento de las demás es su forma de desplegar ese talento. Las mejores empresas no tienen más empleados estrella, sólo los reparten mejor.

La conclusión de este estudio es que el quince por ciento de la plantilla de una empresa (aproximadamente uno de cada siete empleados) son actores claves, o «estrellas». La cantidad de talento estrella no difiere mucho entre las empresas de mayor rendimiento (un 16 % del total de la plantilla) y el resto de empresas (un 14 %). La diferencia está en cómo se despliega ese talento estrella en el conjunto de las organizaciones.

Lo que se observa es que las compañías de mayor rendimiento despliegan su talento estrella de forma intencionadamente no igualitaria. Es decir, concentran sus estrellas en áreas donde estos individuos pueden tener el mayor impacto sobre el rendimiento de la empresa. Como resultado, la vasta mayoría de los puestos críticos para el negocio (más de un 95 %) son ocupados por talentos de primer nivel.

Roles críticos de la empresa

Primero hay que determinar quiénes son y dónde están las estrellas de su organización, la forma de repartirlas no debe ser igualitaria. Son los roles críticos de la empresa (en cada modelo de negocio son diferentes) los que primero deben cubrirse con estos talentos estrella que se deben desarrollar, para centrarse después en otros roles importantes pero menos críticos para los resultados. Sólo entonces podrá garantizar que su talento estrella se ha desplegado de la mejor manera posible.

En esta «carrera por el talento» entre los trabajadores de las organizaciones, las empresas están invirtiendo millones para atraer, desarrollar y retener a los mejores profesionales. Pero en general, la mayoría de las empresas tienen la misma cantidad de estrellas en el conjunto de sus departamentos. Las empresas que mejor rinden son las que tratan a sus talentos estrella como un recurso escaso y saben ubicarlas en los puestos críticos del negocio. Con ello, se logra una importante diferencia de productividad y rendimiento. Así las cosas, la forma de repartir el talento es vital a la hora de generar ventajas competitivas sostenibles en una empresa.