La startup valenciana Inespay ha reinventado los pagos electrónicos con una plataforma que permite realizar las transacciones sin tarjeta de crédito. La pasarela de pagos de Inespay conecta directamente la tienda electrónica con la cuenta bancaria del usuario con un importante ahorro de tiempo y comisiones. La fintech está desarrollando su programa en la aceleradora de Bankia de la Marina de València. La compañía también desarrolla soluciones específicas para cuatro problemas que le ha planteado el banco y que no puede desvelar por razones de confidencialidad. Los dos fundadores de Inespay -Carlos Castellanos y Víctor Pardo- eran gestores de banca personal y analistas de riesgo en una entidad financiera tradicional que dejaron «hartos» de que ignoraran sus propuestas tecnológicas. Víctor Pardo tiene claro que el problema de la banca «es su estructura mastodóntica» que le impide reaccionar ante los retos tecnológicos que está planteando la digitalización.

«La banca tradicional tiene en general una gran desconfianza hacia las fintech. No se dan cuenta de que las startups somos muy ágiles para encontrar soluciones. Nosotros estábamos en Caixabank y nos fuimos porque no nos escuchaban. Bankia sí que nos ha abierto sus puertas y es el que más interés nos ha prestado», aseguró Victor Pardo. El cofundador de la compañía lamentó que el segundo gran problema de las fintech es la regulación bancaria. «En España se protege demasiado a los bancos. A los nuevos actores nos miran con lupa. Un ejemplo es el sistema de pagos Bizum que han impulsado los bancos para hacer traspasos por el móvil. Es una vergüenza que la CNMC (Competencia) lo haya permitido porque es un cártel que monopoliza el mercado. Afortunadamente el tiempo los pondrá en su sitio. Ni está triunfando ni tiene expectativas de hacerlo», alertó Pardo.

Carlos Castellanos recordó que Bizum es el «tercer intento fallido» de la banca española por establecer un sistema de pagos entre personas. «El primero fue Wizzo, después Yapp que tuvo una inversión de 27 millones y ahora Bizzum que ha costado cien millones», subrayó Castellanos.

Inespay permite pagar por correo electrónico facturas en pdf o papel, realizar abonos por transferencia automática en comercios electrónicos e invertir en plataformas de préstamos colectivos (crowlending) y financiación colectiva (crowfunding). «Para los usuarios nuestro sistema de pagos es gratuito. A las tiendas online les cobramos una tasa de entre el 0,6 y el 1 % frente a otros sistemas como Paypal que es del 3,4 %», precisó Carlos Castellanos.

La plataforma diseñada por Inespay también permitirá hacer pagos electrónicos a través del móvil sin utilizar tarjetas de crédito en tiendas físicas a partir de noviembre, que es cuando las transferencias entre diferentes bancos serán inmediatas y no tardarán 24 horas como ahora. La startup utiliza los mecanismos propios del sistema financiero para garantizar la seguridad de los pagos. En los pagos electrónicos, los usuarios entran directamente en su cuenta y utilizan las claves de su propio banco para pagar.