Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El informe

Los fondos impulsan el «ladrillo»

La recuperación del sector de la construcción en València coge fuerza de la mano de tres grandes grupos respaldados por capital estadounidense

El sector de la construcción ha sufrido una transformación radical en la Comunitat Valenciana. El 95 % de los promotores valencianos ha desaparecido durante la crisis y han sido sustituidos por grandes compañías con sede en Madrid que están respaldadas por fondos de Estados Unidos y por constructoras que cuentan con el respaldo de los bancos como Metrovacesa. La única constructora valenciana que ha resistido el envite ha sido Urbem, que prepara su primera promoción en diez años. La actividad constructora en la Comunitat Valenciana se centra de momento en la ciudad de Valencia y en la costa de Alicante por el tirón de la demanda extranjera.

El Ayuntamiento de València ha recibido desde el 1 de enero de 2016 la petición de licencia para 2.589 viviendas. La cifra es significativa porque desde el estallido de la burbuja inmobiliaria las grúas habían desaparecido de València. Detrás de la reactivación del sector están las empresas Vía Célere (respaldada por el fondo Värder Partners), Neinor Homes (impulsada por el fondo tejano Lone Star) y Aedas Homes (creada por el fondo Castlelake). Los fondos de Estados Unidos son conscientes de que España se encuentra ante el inicio de un nuevo ciclo expansivo de la construcción y están apostando fuerte por València después de que los precios se hayan encarecido en Madrid y Barcelona donde la recuperación empezó hace dos años.

Neinor Homes abrió en marzo una delegación en la Comunitat Valenciana con la intención de construir quinientas viviendas al año. La firma ha fichado como delegado territorial a Augusto Monte, un directivo con una extensa trayectoria en el sector inmobiliario y que conoce a fondo el mercado inmobiliario. Las primeras promociones de Neinor son un edificio de 54 viviendas en Camino Azagador del Morro de Malilla y un bloque de 154 pisos en Playa de San Juan en Alicante.

La inmobiliaria de Lone Star acaba de comprar a la promotora valenciana Urbem un suelo finalista en Malilla frente a La Fe con una superficie construible de 50.000 metros cuadrados para la promoción de 400 viviendas. La compañía abonó a Urbem 27 millones de euros por el solar, lo que implica que ha pagado 540 euros por metro cuadrado.

Según los expertos, la principal consecuencia de la llegada de los inversores estadounidenses es la revalorización del precio del suelo como ha ocurrido en Malilla. La entrada de los grandes fondos ha duplicado el coste del suelo en València en los últimos seis meses. El precio de los solares, según confirmó la consultora CBRE, ha pasado de 200 euros el metro cuadrado a más de 450 euros. El coste de compra va a repercutir directamente en el de los precios de los pisos y ya empieza a rozar el umbral de rentabilidad. Una promotora que compra el suelo a quinientos euros tiene que comercializar los pisos a 2.000 euros el metro cuadrado.

Vía Celere, la inmobiliaria del fondo de Minneapolis Värder Partners, ha desembarcado en València con una promoción de viviendas en el número 57 de la avenida de la Petxina de València. La empresa ha comprado un solar frente al antiguo cauce del río Turia para construir viviendas de entre dos y cuatro habitaciones. La compañía todavía no ha cerrado el número de pisos que tendrá la promoción, aunque su intención es comenzar a comercializarla en breve.

Värder Partners compró Vía Célere en febrero por noventa millones de euros. El fondo estadounidense ha entrado con fuerza en España tras la recuperación del sector y espera tener 5.000 viviendas en construcción el año que viene. Para ello, la firma necesita invertir 250 millones de euros al año en la compra de suelo. Con la intención de seguir creciendo, Vía Célere trabaja en la preparación de su debut bursátil que espera que se produzca durante la primera mitad de 2018. La compañía quiere salir al parqué con un valor superior a los mil millones de euros para despertar el interés de los inversores internacionales. El objetivo de la salida a bolsa es conseguir músculo financiero. Un gestor de fondos inmobiliarios explicó que está necesidad de captar capital para crecer rápidamente hace que este tipo de grandes inversores esté dispuesto a pagar por el suelo más de lo normal.

Minneapolis, cuna de fondos

Aedas Homes ha sido la última gran inmobiliaria ligada a un fondo de inversión que ha entrado en València. La historia de Aedas Homes arranca en 2013 cuando el fondo Castlelake, que al igual que Värder Partners tiene su sede en Minneapolis, decidió apostar por la recuperación inmobiliaria en España y comenzó a comprar suelo. La primera promoción de Aedas Home en València es un edificio con 59 viviendas en el PAI de Cuatre Carreres que comenzó a comercializar en marzo y del que ya ha vendido el 70 %. El segundo proyecto de la compañía son 200 viviendas en el solar donde plantaba la falla Nou Campanar en Maestro Rodrigo junto al Lidl que ahora está en construcción. La promoción, que se va a levantar por fases, tendrá cuatro torres con terrazas abiertas a la avenida Maestro Rodrigo y al interior de su urbanización. La comercialización del residencial está prevista para otoño.

Frente a los tres grandes gigantes respaldados por capital estadounidense, la empresa familiar Urbem va a promover 104 viviendas de protección oficial frente a La Fe tras haber superado el concurso de acreedores. Los pisos contarán con piscina y costarán sobre 1.800 euros el metro cuadrado. La promotora valenciana busca oportunidades de inversión en el desarrollo de suelo, la promoción de viviendas y la compra o construcción de hoteles.

Compartir el artículo

stats