A menudo hago referencia al famoso proverbio chino que dice, «si caminas solo irás más rápido, si caminas acompañado irás más lejos». Y es que tras haber creado en Demium más de 30 startups desde cero, tengo claro que el talento es el factor más determinante para el éxito de una empresa. Hoy os contaré algunas claves para crear el «Dream Team» soñado.

En primer lugar, vamos a hablar de los co-founders, el núcleo de la compañía. Son aquellas personas que arrancan el proyecto contigo desde el inicio o en las fases iniciales (late co-founders). La principal diferencia con el equipo de trabajadores, es que tienen un porcentaje significativo (más del 5%) de la compañía. Lo más positivo es que al ser socios de la startup garantizas su máxima entrega, compromiso y su motivación a largo plazo.

Una de las claves para tener un gran equipo de co-founders, es que haya equilibrio en los perfiles. Si juntas tres compañeros de la carrera, como dice José Cabiedes, no tendrás tres socios, tendrás el mismo tres veces. La configuración más habitual es: el CEO, persona normalmente de negocio, cuyas principales responsabilidades son, marcar la visión, alinear todos los recursos en esa dirección, ser el manager del resto y financiar la compañía. El CTO, responsable del área técnica, no es un programador, es mucho más. Será la persona que deberá dar soluciones técnicas a las necesidades de negocio y deberá crear y liderar al equipo técnico necesario. El CMO, un saco en el que se suele meter marketing, comunicación y ventas en función de la compañía. Será el responsable de liderar este área. Estos 3 son los perfiles más habituales, aunque en función de la compañía también puede haber otros como el CDO, responsable del área de diseño, el CFO, financiero o el COO, director de operaciones.

La clave para elegir un buen equipo de co-founders no es lo que pueden aportar al día de hoy, sino lo que proyectas que serán capaces de hacer el día de mañana. Un 20% de una compañía recién creada no vale nada, pero esas participaciones pueden valer muchos millones en unos años y un error en la elección de tu co-founder, puede pagarse muy caro. Un aspecto fundamental que deberás buscar en tus co-founders, es que haya alineación en valores o por lo menos que todos conozcáis y aceptéis los valores del resto. Pero ojo, eso no quiere decir que todos veáis el mundo igual. Tener un equipo con estilos y capacidades totalmente distintas es tremendamente enriquecedor.

Otra figura importante en la creación del equipo es la de los advisors. Son personas de referencia que tienen un valor diferencial en el proyecto. Podrán ser personas con un conocimiento profundo de un área clave del proyecto, personas con experiencia en el sector donde operas o personas capaces de abrirte puertas importantes. Normalmente se establece con ellos una colaboración de determinadas horas al mes (8-20) a cambio de algo de porcentaje de la compañía (0,5-3%) y en ocasiones una retribución económica. Tener 2-3 advisors de primer nivel puede marcar la diferencia del rumbo de tu startup.

Por último hablaremos de los trabajadores. Es habitual que los trabajadores participen de algún modo de la sociedad, ya sea con participaciones (menos del 3%), stock options o phantom shares. De este modo podrás conseguir que se incorporen mejores perfiles y aumentará significativamente su nivel de compromiso y sentido de pertenencia.