Las experiencias de formación adquiridas en el exterior, tanto en centros docentes como en las propias empresas, resultan claves para los directivos que ocupan diversos puestos de responsabilidad en compañías de la Comunitat Valenciana. La ampliación de conocimientos en otros países, sobre todo de idiomas, resulta muy valorado en un ámbito profesional cada vez más competitivo y donde los jóvenes deben demostrar adecuados conocimientos y actitudes para acceder al mercado laboral que ofrece en la actualidad más oportunidades tras la dura crisis económica ya superada en España.

Así lo reconocen profesionales de diferentes ámbitos empresariales reunidos por Levante-EMV para comentar sus respectivas experiencias de aprendizaje en el exterior. En este encuentro han participado Vitoria Gilabert, jefa de Innovación del Grupo Alimentario Citrus (GAC); Juan Antonio Delgado, director de Desarrollo de Negocio de Stadler Rail; Manuel Ayza y Javier Sanchis, responsables del área de Cataluña y Alicante de Global Omnium, respectivamente. También acudieron José Luis León y Fernando Mas, médicos de ERESA que trabajan para los servicios de Radiología del Hospital Clínico de Valencia y Hospital La Fe respectivamente y unos de los primeros valencianos en conseguir el prestigioso certificado de la Sociedad Europea de Neuroradiología.

Estas son algunas experiencias relatadas por los directivos valencianos con experiencias de aprendizaje y trabajo profesional, quienes sostienen que la formación internacional mide fortalezas y debilidades de las empresas:

VICTORIA GILABERT

Ampliar estudios en el exterior tras pasar por la Universidad Politécnica de Valencia; en mi caso fue en Brasil, donde estuve ocho años en el ámbito profesional de las tecnologías de los alimentos, fue clave para desarrollar mi carrera profesional y encontrar trabajo en España. Sin duda, han sido fundamentales a lo largo de mi etapa profesional en Grupo Alimentario Citrus (GAC). Tal experiencia enriquecedora, una vez superada la barrera del idioma, me permitió ampliar conocimientos en este campo de la alimentación. Una de los aspectos que más sorprende cuando acudes a universidades de otras países es el cuadro docente, pues hay profesores de varias nacionalidades. Aquello parecía la ONU. En el sector agroalimentario la formación y la investigación aprendida de países punteros importa mucho para estar en vanguardia en el sector. Estamos rodeados de buenos talentos y que en el caso de GAC fomentamos a partir de un programa llamado Junior Talent, destinado al desarrollo profesional para jóvenes recién titulados, que tiene una duración de entre 2 y 3 años para formar y desarrollar a los futuros líderes de la compañía. Cuenta con un presupuesto de 1 millón de euros. Recomiendo a los jóvenes profesionales que sean versátiles y con actitud positiva. Que no pregunten si se trabaja los fines de semana.

JAVIER SANCHIS

También yo pasé por la Politécnica de València y conseguí una beca para ampliar estudios en Polonia, donde pude ver de cerca cómo se trabajaba en la industria de servicios hídricos en aquel país. Gracias a las becas Erasmus inicié estudios en Manchester, donde también me sorprendió la internacionalización del profesorado y que las universidades tenían más medios que en España. Había mucha gente asiática. Global Omnium es una compañía con alto grado de internacionalización y por eso aprovecha la formación que viene del exterior. La formación recibida se extrapola fuera de nuestras fronteras en un sector donde la calidad y la seguridad son prioritarias. En el caso de Global Omnium apostamos por la formación profesional en el sector a través de la Cátedra Agua, donde participan la Universidad Politécnica de València y la Fundación Aguas de València.

FERNANDO MAS

En los años ochenta tuve oportunidad de estudiar en Estados Unidos gracias a un intercambio. Eso fue determinante para aprender inglés y, posteriormente, realizar estancias en centros de radiodiagnóstico de Nueva York y de Los Ángeles, donde revalidé conocimientos . Salir al exterior es fundamental por el trasvase de conocimientos y experiencias que puedes adquirir. La formación en España en el campo médico es buena y así lo constatan los hospitales españoles, que se promocionan en el exterior y destinan recursos para formar a su personal. En este sentido, por ejemplo, Eresa tiene conciertos con hospitales públicos y también mantiene relaciones con el mundo de las universidades. En el ámbito médico es crucial compartir conocimientos tanto como investigar.

JOSÉ LUIS LEÓN

El aprendizaje fuera de España es importante porque amplía tu campo de conocimientos. En Chicago y Nueva York aprendí mucho de diagnósticos médicos, si bien hay que reconocer que las universidades españoles y el sector médico, en líneas generales, tiene un nivel muy elevado gracias a la enseñanza y al sistema MIR. Animo a los jóvenes a aprender idiomas, pero a aprenderlo bien. En el campo médico España tiene un buen nivel, que en buena parte viene de los conocimientos adquiridos por los profesionales en el exterior. La teoría se aprende en los libros y por eso importa el compromiso de las empresas con la formación de su personal en otros países. También se ha dicho aquí y lo confirmo por mi experiencia profesional que en Estados Unidos se mueven más que aquí. Pienso que irse fuera es una oportunidad y no un problema para encontrar un trabajo. Como radiólogo de Eresa en un centro hospitalario con programa MIR, además de participar en las sesiones clínicas y en los comités hospitalarios de mi especialidad participo activamente en la formación de médicos residentes.

MANUEL AYZA

Coincido con el éxito de las becas Erasmus para salir al exterior durante la etapa universitaria. En mi caso fue en Holanda. Allí los centros académicos son muy pragmáticos. La empresa municipal de Amsterdam aportó conocimientos profesionales y humanos en el mundo del trabajo. El idioma francés, además del inglés, abre muchas puertas en el mundo del trabajo, donde hay gente que habla inglés aunque menos la lengua, al menos en nuestra compañía. He pasado por Lisboa, Venezuela, Francia... En fin, en muchas ocasiones hay que ser voluntario para estar preparado y aprovechar las oportunidades que surgen en el mercado laboral.

Pienso que los jóvenes profesionales, los que tienen menos de veinticinco años, a veces no cumplen con las expectativas generadas pese a su conocimiento de idiomas, formación en el exterior o postgrados realizados. Es el «drama» de parte de nuestros jóvenes en la actualidad.

JUAN ANTONIO DELGADO

Efectivamente, francés e inglés son claves. En mi caso tenía claro desde joven que quería trabajar en Estados Unidos y me fui a Nueva York al sector de la banca. También en Luxemburgo, en el Banco Europeo de Inversiones, aprendí mucho. Lo que más me llamó la atención en el extranjero es que se enseña a «pensar» mientras que aquí se transmiten «conocimientos». También los sistema de planificación me parecen interesantes.Cuentan que Salvador de Madariaga y José Ortega y Gasset tuvieron cierto desencuentro dialéctico en algún tema de gran calado intelectual. Madariaga, o algún mentor, debió utilizar como argumento a su favor que sabía cinco idiomas. La respuesta de Ortega fue breve: éso sólo quiere decir que Don Salvador es tonto en cinco idiomas. Creo que no por hablar idiomas dices más tonterías.

Por otro lado, además de enseñar a pensar, en países como Estados Unidos o en Alemania -país de origen de algunos de mis antiguos jefes- se enseña a planificar y no se improvisa tanto como en España. Respecto al futuro profesional de los jóvenes soy algo más optimista y pienso que las empresas están ofreciendo más puestos de trabajo a los profesionales mejor preparados. Eso sí, deben estar preparados para la movilidad laboral y pensar en las plusvalías que pueden reportar a sus empresas. A algunos les gusta tener un «empleo» aunque lo importante es tener un trabajo, que tiene que más con la actitud y los méritos. Nos iría mejor en España si fuera un país meritocrático. La transferencia de conocimientos entre el mundo de la empresa y la universidad funciona mejor en otros países más avanzados que España. También Stadler Rail València, fabricante de trenes, impulsa un Cátedra con la Universidad Politécnica de Valencia, donde se forman ingenieros y se enseña, sin duda, a «pensar e innovar». Además, Stadler también apuesta por la Formación Profesional Dual, replicando el modelo alemán, tal útil para que los jóvenes se formen trabajando en las empresas.