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La Empresa

El futbolista que colgó las botas para fabricar piezas de coches

El presidente de Matrival, Felipe Peña, cumple casi cincuenta años al frente de la compañía familiar que inicia una nueva fase de internacionalización

El futbolista que colgó las botas para fabricar piezas de coches

Felipe Peña (Tobarra, Albacete, 1944) pertenece a esa generación de empresarios que sufrió los rigores y la austeridad propios de la postguerra civil y que hizo de la necesidad virtud durante el desarrollo industrial de la economía española para poner en marcha ambiciosas iniciativas empresariales a principios de los años sesenta. Este exjugador del Levante UD -un extremo izquierdo con clase y de media docena de goles por temporada en las ligas de 1965/1966 y 1966/1967- tardó poco tiempo en colgar las botas porque quería entrar de lleno en el mundo de la empresa.

Tras desempeñar diversos oficios y tener la valentía de montar un negocio por su cuenta, casi medio siglo después, se siente orgulloso de Matrival: un grupo empresarial especializado en matricería que suministra a los principales fabricantes de automoción así como a Telefónica o Porcelanosa, entre otros grandes clientes. En este último ejercicio de 2017 ha logrado 50 millones de euros de cifra de negocio (un 15 % más que el anterior) y emplea a 400 trabajadores en dos fábricas en la Comunitat Valenciana. Y en breve instalará factorías en Portugal y México.

«Mi familia se trasladó a València cuando yo tenía 16 años. Con esa edad -recuerda el presidente de Matrival- me puse a trabajar en una sociedad que fabricaba las máquinas de cine. Entonces aún funcionaban con carbón; por eso a veces se quemaba la película. Y después de hacer el servicio militar, donde por cierto, coincidí con Domingo Ochoa, de Industria Ochoa, me apunté a la Escuela de Artes y Oficios y así trabajaba por la mañana y estudiaba por la tarde. Ahí fue cuando empecé a pensar en montar mi propio taller con un socio, José Iniesta, que conocí en el servicio militar. Ambos coincidimos en Industrias Tay, una matricería en la que empezamos con poco más de veinte años».

Felipe Peña decidió abandonar el equipo de Orriols, que entonces jugaba en el campo de Vallejo, porque «el trabajo era lo primero; antes que el deporte aunque algunos compañeros, como Pedreño, ficharon por el Real Madrid», recuerda con nostalgia el empresario que no perdió su afición al deporte del balón y llegó a vincularse con equipos de la liga regional (Torrent CF) y, posteriormente, en campeonatos de empresas. En 1972, junto con su socio Francisco Iniesta montó un taller y la sociedad Matrival se constituyó en 1975, en una planta baja pequeña próxima a la avenida del Puerto. En aquellos momentos los clientes procedían del sector de porteros electrónicos para viviendas.

Moldes para el Ford Fiesta

«En moldes y matrices la industria española era muy competitiva en aquellos primeros años de desarrollo industrial en España porque garantizaban calidad y precios baratos, como los de China en la actualidad. Estaba de encargado en Industrias Tay, había mucha demanda y desde ahí planeamos poner en marcha nuestro propio negocio», explica Peña. Pronto entró en contacto con grandes mercantiles como Dr. Franz Schneider, una compañía de fabricación de componentes para el sector la automoción. En su inicios Matrival llegó a fabricar los primeros moldes para mandos de la calefacción del Ford Fiesta. Antes ya había trabajado para el sector del juguete.

«Los clientes -comenta Peña- nos han ido exigiendo cambios que hemos adaptado. Cuando hacíamos un trabajo nos pedían la garantía de que todo estaba perfecto, así que para poder ofrecer proyectos llave en mano y asegurarnos de que el molde funcionaba correctamente incorporamos nuestras propias máquinas de inyección. Y de ese modo, de la fabricación de moldes pasamos a la producción de piezas, que es, todo sea dicho, donde se gana más dinero», reconoce el representante del clúster de la automoción valenciano AVIA.

Grupo Matrival es proveedor de Opel, Seat, Ford, Volkswagen y Renault así como de muchas cadenas de suministro del automóvil del rango Tier 1 -es decir, de los grandes- como Antolin, Magna, Faurecia, Plastic Omnium y Yanfeng. Fue uno de los pioneros en integrarse en AVIA. La automoción representa el 90 % de su negocio.

Experiencias en el exterior

También recuerda episodios más críticos. «La enseñanza que sacamos de Marruecos (donde abandonó una fábrica con un socio local) es que resulta necesario buscar buenos acompañantes en el camino. Si algo puedo aportar a otros proveedores de automoción es ese aprendizaje. Nosotros no supimos elegir algún perfil y lo cierto es que, por poco, nos arruinaron. Afortunadamente pudimos salir, sin demasiados problemas» recordaba Felipe Peña en una reciente jornada de AVIA tras recibir un galardón.

En 2018 Grupo Matrival pone rumbo al exterior. La compañía abrirá fábricas en Portugal y México para suministrar piezas a multinacionales del negocio sobre cuatro ruedas como la corporación Volkswagen. La nueva instalación de Matrival en Portugal, próxima a la fábrica Autoeuropa, donde se producen tres modelos Volkswagen (Sharan, Scirocco y T-Roc) y el Seat Alhambra, prevé iniciar su actividad de inyección de plásticos para producir moldes y realizar tareas de mantenimiento de matricería a partir del próximo verano, según ha reconocido el máximo responsable de la firma con cuartel general en Beniparrell. Además, Matrival se ha aliado con un socio local en México -cuyas factorías de automóviles siguen en alza a pesar de la paralización de inversiones de multinacionales de Estados Unidos por la política proteccionista del presidente Trump- para abrir otra industria auxiliar para suministrar componentes y realizar tareas de mantenimiento de matricería que estará operativa a finales de año.

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