Las lingüistas de la Universidad Autónoma de Barcelona, la valenciana Carla González Collantes y la catalana Isabel Olid, presentaron recientemente en Valencia un estudio que acusa a Canal 9 de usar la lengua como un «elemento clave» de la «manipulación política» del Consell.

Las dos expertas consideran que Canal 9 emplea diversos «recursos lingüísticos con el fin de modificar cifras, exaltar la política del Gobierno valenciano y, en casos más extremos, esconder noticias como el caso Gürtel».

El estudio, presentado en el XXVI Congreso Internacional de Lingüística y Filología Románica que se celebró recientemente en Valencia, toma como ejemplo las informaciones emitidas por Canal 9 en la semana del 9 al 15 de agosto de 2010 sobre el estado de las cuentas del Palau de les Arts. Según González Collantes y Olid, el canal valenciano «tapó» el sobrecoste de 600 millones de euros en las obras del complejo, destacó las cifras positivas del Palau de les Arts y, en general, «dio una imagen más favorable que otros medios consultados, incluso, afines al Gobierno valenciano».

Para ello, según las expertas, se sirvieron de diversas técnicas. En primer lugar, continúa el documento, «utilizaron la técnica de ocultar mostrando», un término científico de Pierre Bordieu que consiste en presentar una información pero desfigurándola o evitando algunos aspectos relevantes.

Dos ejemplos de «ocultar mostrando», según González Collantes, «son el hecho de que Canal 9 nunca utilice el término ´imputado´ para Francisco Camps cuando informa del caso Gürtel o que utilice la palabra castellana ´cohecho´ y no la valenciana ´suborn´ para referirse a su presunto delito por la mayor claridad de la segunda». Otra técnica de los redactores de Canal 9, según las expertas, «pasa por aportar cifras en valores absolutos de forma que no se puedan comparar con ninguna otra».

Del mismo modo, «cuando una cifra es favorable a sus intereses, se repite de forma compulsiva hasta por cuatro o cinco actores —presentador, periodista desplazado, testimonio, etcétera— para que quede bien fijada», destaca el estudio.

Sin «datos coprometidos»

En otros caso, apuntan las autoras del trabajo, « directamente, Canal 9 no aporta datos comprometidos, como los despidos en el Palau de les Arts, los recortes en las escuelas de música o la condena a las Cortes por vetar preguntas sobre el caso Gürtel».

El estudio lingüístico también aporta datos del uso del idioma para «crear opiniones favorables a determinadas políticas. Por ejemplo, se utilizan adjetivos y argumentos muy positivos para referirse a diversos hechos o lugares como ´pionero´ o ´de vanguardia´, o léxico con connotaciones positivas, como ´liderar´, ´generar´ o ´consolidar´». «La idea —asegura González Collantes— es exaltar la Comunitat Valenciana como centro tecnológico y apelar a un sentimiento de orgullo de los valencianos para evitar la crítica política», explica la autora.

Junto a estas técnicas, el estudio también habla de otras prácticas como «no dar la voz a las fuerzas de la oposición al Consell, el uso de construcciones como ´desviación al alza del presupuesto´ para evitar términos como ´sobrecoste´ o el uso de frases descontextualizadas que pueden llevar a engaño».

Para las lingüistas, «este procedimiento resulta muy negativo, especialmente porque un porcentaje muy elevado de la población se informa tan sólo a través de la televisión».

En su estudio, González Collantes y Olid han recabado también otros datos como la comparación entre las noticias emitidas y las descartadas: «en el mismo día que Canal 9 decidió no dar ninguna información sobre el caso Gürtel, dedicó muchos minutos a informar del calor, los toros, la lista de los mejores culos femeninos, la depilación masculina, el ´arròs amb costra´ más grande del mundo y los tatuajes», concluyen las estudiosas.