Entrar a una clase y escuchar al docente hablar de Star Trek, Juego de Tronos, Friends y otras muchas series parece poco verosímil, pero los alumnos de Comunicación Audiovisual de la Universidad de Murcia llevan años haciéndolo. Las series de televisión se han hecho un hueco en el ámbito académico de la mano de María del Mar Grandío, profesora de la facultad de Comunicación, quien lleva sus investigaciones fuera del aula con su nueva obra: Adictos a las series: 50 años de lecciones a los fans.

Profesora de una de las asignaturas más aclamadas por los alumnos de Comunicación Audiovisual de la UMU, Ficción seriada y multimedia, Grandío lleva quince años investigando sobre su gran pasión, las series, con las que ha conseguido combinar su hobby y su profesión. De hecho, ella misma se define como una ´ProfeFan´: «Me considero sobre todo una investigadora, pero no puedo evitar ser fan», asegura.

La profesora de la UMU comenzó su andadura con una tesis sobre Friends, su serie favorita, porque para ella «ha significado mucho personal y profesionalmente». Desde entonces, no ha parado de investigar y publicar obras sobre el ´fandom´ (fenómeno fan). «Soy fan de los fans, más que de las series», declaró ayer en la presentación de su libro, en el que aborda la ficción desde el punto de vista de los seguidores.

Adictos a las series: 50 años de lecciones a los fans es un libro ameno, un proyecto personal en el que hace un recorrido por las series de televisión a través de los ojos de los seguidores y en el que «el lector puede sentirse apelado e identificado».

El título hace un guiño a los seguidores como adictos, pues es como se les consideraba en los primeros estudios del ´fandom´. «Se relacionaba el fenómeno con una adicción, algo problemático, hasta que se descubrieron sus aportaciones socioculturales», relata la profesora, que añade que ese fanatismo es ahora «casi un reconocimiento de orgullo».

En la obra detalla cómo se genera un admirador, las implicaciones personales que ese proceso conlleva, y analiza los tipos de seguidores. «No todos los fans son iguales, cada uno lo siente de una forma muy personal. Hay fans creadores, activistas, conversadores...», enumera Grandío.

Los ´creadores´, explica, son aquellos que realizan su propio contenido a partir del producto televisivo, mientras que los ´activistas´ son los que se organizan para luchar por la continuidad de su admirada serie. Aunque la autora se considera más analista que admiradora, afirma que ella entraría en el grupo de los fans ´conversadores´, dado que se informa mucho sobre las ficciones y no para de hablar sobre ellas.

También aparece en Adictos a las series una selección personal de nueve producciones, «de buena televisión que han generado un grupo concreto de seguidores» y que ella misma ha estudiado a partir de estudios de otros académicos. Star Trek, Doctor Who, Twin Peaks, Juego de tronos, Perdidos o El Ministerio del Tiempo son algunas de las ficciones en las que se centra.

«He hecho una buena selección que permite ver las diferentes tipologías del ´fandom´», asegura la profesora de la UMU, que explica que Star Trek y Doctor Who resultan un buen ejemplo, ya que son dos series históricas y longevas que siguen calando en la sociedad actual. Las dos resultaron en su momento el ejemplo para empezar a revalorizar al fan. Con Star Trek, según Grandío, aparecieron por primera vez los ´activistas´, que se esforzaron para mantenerla en emisión, como ocurrió recientemente con El Ministerio del Tiempo. Twin Peaks, por su parte, muestra la influencia de los seguidores en internet, ya que tiene detrás numerosos foros de fanáticos.

Además, la autora finaliza su nuevo libro con entrevistas con las que pretende «hacer un homenaje a los estudiosos, que se han centrado en el fenómeno, y en los propios fans». Así, aparecen importantes investigadores como Henry Jenkins o Carlos Scolari, el productor transmedia de El Ministerio del Tiempo, y el presidente del club de fans de Star Trek, entre otros.