Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Reunión

Layhoon escucha y medita

Habló con Salvo y aún no ha tomado decisiones tras la «crisis» que desató el fichaje de Rodrigo Caio - Con el paso de los días, Amadeo está más sereno después del cabreo notable del viernes

Amadeo Salvo, sonriente, ayer cuando abandonaba la sede. sd/f. calabuig

«Presidente, ¿el valencianismo puede estar tranquilo?», se le preguntaba ayer a Amadeo Salvo cuando, poco después de las siete de la tarde, cuando abandonaba muy sonriente el edificio social del Valencia. «Como siempre, estamos casi en la Champions», respondía con una amplia sonrisa. Porque, según el presidente ejecutivo, ayer fue un buen día. Prueba de ello es que, tras regresar de unas minivacaciones lejos de España, acudió a la sede del club en Micer Mascó acompañado de uno de sus hijos porque, dijo: «voy a comprarle una moto (en una tienda situada en la misma manzana)». Con estas ambiguas frases salía Salvo al paso de la expectación generada en los últimos días por la reunión entre los máximos responsables del área deportiva.

Amadeo Salvo conversó en la jornada de ayer con la presidenta del Consejo Layhoon Chan, y no era un día para tomar decisiones, sino de tener tranquilidad. La hoja de ruta seguida por la ejecutiva de Singapur ha sido escuchar, primero a Rufete, y luego a Salvo, para con tranquilidad analizar la situación antes de tomar una decisión. Quienes conocen la figura del presidente saben que hay momentos en los que los impulsos se imponen a la razón, y él fue el primero, una vez abandonó la ciudad rumbo a Turquía a pasar unos días de vacaciones, que desde el exterior y con la perspectiva del tiempo la situación se veía un poco con mayor tranquilidad.

Desde primera hora de la mañana, todos los supuestamente implicados en la cita, jugaron al gato y al ratón. Y es que, ya se había advertido, de la intención del club de que no trascendiera nada del encuentro. Así fue. La presidenta Layhoon Chan y el consejero Kim Koh no se dejaron ver en todo el día por las oficinas del club. En la Ciudad Deportiva, donde habitualmente trabaja la Dirección Deportiva, sólo estuvo un rato a primera hora de la mañana Joan Salvans. Sin embargo, fue al mediodía, cuando Rufete, Ayala y Salvans, se reunieron a comer en un restaurante situado en el Parque Tecnológico. Allí estuvieron durante algo más de dos horas y media.

Prácticamente una hora después de la que el trio abandonaba el local „el primero fue Rufete„, llegaba a las oficinas del club Amadeo Salvo. Con un rostro sonriente, de buen humor, y consciente de que la situación actual precisa de una definición de la estructura interna, no por ello se va a lanzar un pulso al actual propietario del club. Todas las partes son conscientes que Peter Lim es el máximo accionista y puede tomar las decisiones que considere.

Compartir el artículo

stats