Nuno está descubriendo una nueva sensación al frente del equipo. La percepción del vértigo y la soledad. Las críticas vertidas hacia él por la grada, lo han descolocado. Al luso le sorprendieron los pitos el día de la presentación del equipo y, ante el Betis con Peter Lim en Mestalla, le incomodaron aún más. El «entorno» que él creía controlado, ahora le responde. Sus decisiones, por una u otra razón, son cuestionadas; en público por la afición y en privado por sus propios jugadores que no llegan a entender la política de rotaciones que está aplicando. ¿Ha hablado de esto con Peter Lim?, posiblemente sí. «Siempre que nuestro dueño está en Valencia tenemos conversaciones, hablamos de la actualidad del club y de cosas importantes. También con la presidenta. Nuestro único objetivo es mejorar. Tenemos un camino por delante y juntos lo recorreremos», respondía.

Visiblemente afectado por unas críticas que ha leído „en rueda de prensa volvió a reconocer que lo lee «todo»„, el técnico volvió a «asumir» el mea culpa respecto a las «responsabilidades inherentes» a su cargo como entrenador, pero no por otras cuestiones. «Aquí todo se ha hecho de forma conjunta, no se trata de ver quién tiene la culpa sino de trabajar juntos en busca de la mejora. Es lo que vamos a hacer», minimizaba al ser preguntado por el poder que, tras la salida del manager general, podría haber asumido. «Las críticas deben servirnos para esforzarnos en la búsqueda del rendimiento», lanzaba.

El técnico, que en las últimas fechas se había mostrado distante y poco dialogante con sus interlocutores, bajó ayer la barrera para, en sentido metafórico, humanizarse. Tras apuntar que «no sonrío porque soy una persona seria», el portugués compartió que «describir mi imagen y considerar la opinión que tienen los demás de mi es complicado. Me considero una persona, por encima de todo, muy profesional y honesta. Tengo el placer enorme de entrenar al Valencia y venimos todos a Paterna a mejorar, a poner todo de nuestra parte para que todo vaya bien».

Nuno señaló que su «único objetivo» y el más inmediato es ganar hoy al Espanyol y poder sumar la segunda victoria de la temporada. «Con partido cada tres días, esto no para. Vamos a un campo que sabemos que es difícil en el que además de pensar en el rival debemos centrarnos en mejorar nuestro rendimiento», reflexionaba. «Al equipo le viene bien jugar sea donde sea porque estamos preparados para competir en todos los estadios. Debemos transformar esos momentos malos en otros de alegría, para que la afición sepa que sus jugadores siempre dan todo lo que tienen», apuntaba.

La puntuación a estas alturas, sin embargo, no le preocupa en exceso porque, defendió, «la Liga es muy larga». «Es la jornada cinco y tenemos todos la conciencia de que podíamos tener más puntos. Esto es muy largo. Vamos partido a partido, a intentar mejorar nuestra solidez defensiva y traducir nuestra producción ofensiva en goles. Estos son los dos retos que tenemos para mañana „para hoy„», lanzaba. El desafio ahí está.