Demasiadas heridas por cerrar. El día a día del Valencia no debe ser nada cómodo. Nuno llega todas las mañanas a Paterna y ya sabe que le esperan varios jugadores que no le van a mirar muy bien. Que tiene que preparar una nueva lista de convocados y con el poco tiempo que le sobra preparar el próximo partido. Eso probablemente sea lo mejor. La acumulación de partidos, si son lejos de Mestalla mejor, posibilita que sin apenas margen para el debate, el equipo tenga la oportunidad de ir creciendo en su juego, en intensidad y competitividad.

En el fútbol todas estas heridas se curan con la vacuna de la victoria. Solo ganando partidos puede devolver la tranquilidad al cuerpo técnico, a la plantilla y a la afición. La primera gran herida que debe de cerrar Nuno es el juego y la imagen que da el equipo en cada partido. Si en esto no mejora será muy difícil que el equipo siga ganando partidos. Esta es la principal queja de los aficionados en Mestalla. La pérdida de puntos es consecuencia directa de lo que se ve en el terreno de juego. Pero es que ni ganando un partido tres a cero es capaz de aportar cierta tranquilidad a la grada. Contra el Levante se ganó porque el fútbol sí entiende de calidad. Normalmente, los mejores ganan aun jugando mal. Por eso, creo que el Valencia a poco que mejore y Nuno sea capaz de restañar algunas heridas, el equipo podrá acercarse a la cabeza de la clasificación. Eso es fácil de descifrar.

Pero seamos sensatos. El ambiente que se ha generado en torno al entrenador y la delicada situación de algunos jugadores de la plantilla no invita precisamente al optimismo. Nuno ha elegido arreglar ciertos problemas a martillazos. Lo cual nos lleva a un situación en la que se ganan los partidos por casualidad. Y así es muy difícil seguir funcionando. La afición ya no pasa ni una. Y hasta Parejo está siendo víctima de todo este desbarajuste.

Aquí en Valencia tenemos lo que hemos querido. Lo hemos tolerado casi todo. Ahora sólo somos meros espectadores con escasa o nula incidencia en el club. Si a la gente lo que no le gusta es Nuno, solo puede expresar su malestar en Mestalla como así ha ocurrido con otros entrenadores. Si en realidad lo que no gusta es el proyecto en sí, no tiene nada que hacer. Que sea para bien!