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La hora de la verdad

La hora de la verdad

Minuto treinta de la segunda parte en Mestalla, marcaba Adúriz para el Athletic de Bilbao y con ese gol apeaba al Valencia CF de la Europa League.

El fútbol a veces es cruel, esta vez la moneda cayó otra vez con la cruz para los de Mestalla. Como no creo en el Karma ni cosas de esas, comienzo a pensar que cuando la suerte siempre te da la espalda es que a lo mejor es algo más que la suerte el motivo de tu desdicha. No sé, cosas mías...

A partir de ese momento (el del gol de Adúriz), como quiera que el Valencia fue incapaz de materializar las dos opciones de gol que tuvo, el Valencia comienza a escribir su futuro.

Primero en lo que queda de Liga. Dos partidos hacen falta para asegurar la permanencia matemática. Jugando como contra el Athletic, será fácil encontrar dos víctimas para sumar esos seis puntos. Jugando como contra el Levante (sin quitarle un ápice del mérito al equipo granota), el escalofrío sacude lo más profundo de cualquier corazón que se considere levantinista.

¿Por dónde pasa el futuro? Sólo la propiedad lo sabe. Y quizá eso es lo que más inquiete en la calle ¿Será Neville el entrenador para el próximo año? ¿Y si no lo es? ¿Quién va a elegir sus sustituto? ¿Bajo qué criterio? Si creía la parroquia local estar mal con Nuno, visto a Neville ¿quién asegura que el venga no va a hacer bueno al inglés?

¿Y la plantilla? En un Valencia sin Europa ¿qué jugador -de los que tenga mercado- va a querer quedarse? ¿Cuántos han llamado/van a llamar a «Yorye» para que los saque de aquí? ¿Cuál va ser la implicación de estos en lo que queda de temporada? ¿Y la propiedad, sin Champions va a rebajar en 30 millones de euros el coste de plantilla, o va a hacer otra ampliación -pongamos de 50 «kilos» previa comsulta con LFP- para recomponer este grupo fracasado?

Sobre el entrenador sigo pensando que la idea de Lim es renovarle (tenemos la mala suerte de que un solo ser humano sobre la faz de la tierra piensa que Gary Neville puede llegar a ser un buen entrenador, y ese es precisamente el propietario Peter Lim.

De lo que ocurra con la plantilla, saldrá el indicador definitivo de para qué ha llegado Suso García Pitarch al Valencia. Los próximos meses van a dibujar muchas cosas.

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