El Valencia medita con paciencia la posible renovación de Pako Ayestarán. El técnico donostiarra, de 53 años, es el candidato más firme que maneja el club, con el aval de haber reactivado en tiempo récord la situación clasificatoria de un equipo bloqueado. Pero la decisión de Jesús García Pitarch, a quien Peter Lim ha dio vía libre para la planificación del proyecto deportivo en una cena en Madrid el pasado domingo, no es definitiva. En la elección final, sin duda, contribuirá el modo en el que acabe el Valencia la temporada, y si confirma la progresión experimentada hasta el momento.

Desde el exterior, el entrenador del Valencia sigue recabando adeptos. Levante-EMV pulsó ayer la opinión de dos exjugadores del club que, además, tienen la particularidad de conocer a Ayestarán, de su anterior etapa como preparador físico de Rafa Benítez, en los tiempos del doblete. El exguardameta Santiago Cañizares fue categórico, a la pregunta de si el Valencia ha mejorado con el último relevo técnico: «Todo ha mejorado, en todo el equipo», señala Cañizares, de 46 años, y portero del equipo blanquinegro entre 1998 y 2008.

Una opinión parecida manifestaba Andrés Palop, actual técnico del Alcoyano, que destacó la recuperación del fútbol atacante desde el aterrizaje de Ayestarán: «El Valencia ha evolucionado. En el juego ofensivo se ve un conjunto más trabajado, con un funcionamiento más colectivo y sin tanta dependencia de las individualidades», valora el exportero de l’Alcúdia. Palop, en el primer equipo valencianista desde 1999 a 2005, destaca la facilidad comunicativa de Ayestarán: «Hace ya 12 años que no tengo un contacto tan frecuente con él, pero sí recuerdo que es una persona comunicativa, de carácter abierto, algo muy importante para la gestión de grupos. Además, tiene el plus de ser todo un experto en la preparación física y ha acumulado experiencia en sus etapas en México e Israel», indica Palop, que mantiene en sexta posición al Alcoyano en Segunda B.

Sobre esa base, ¿debería dar el club un paso adelante y renovar a Ayestarán? Palop lo tiene claro y apuesta decididamente por el «sí»: «Sí lo renovaría porque creo que se ha merecido la oportunidad y en poco tiempo ha logrado crear un equipo más cuajado y trabajado».

Más cautelas muestra, en cambio, Cañizares, por la distancia con el día a día del club y el escaso tiempo de la etapa de Ayestarán: «Para tomar esa decisión habría que estar cerca de ese vestuario, ver los entrenamientos... Desde fuera, en cinco partidos no hay suficiente análisis», sentencia.

Subirats, cauto

Otro buen conocedor de Ayestarán es Javier Subirats, arquitecto del último gran Valencia. El analista de Levante-EMV reconoce la mejoría valencianista, «individualizada en el papel de jugadores como Parejo y Rodrigo» y apreciada también «en una comunicación más fluida, que también incide en el rendimiento».

No obstante, «Subi» también considera que en partidos como los disputados en Las Palmas y Getafe el equipo ofreció «dudas», por lo que prefiere no pronunciarse abiertamente sobre la renovación. «Son pocos partidos para valorar su trabajo, y con el añadido de que algunos encuentros del final de Liga están condicionados por no haber tanto en juego, como el día del Eibar». Eso sí, Subirats es partidario de que la decisión no dependa de los resultados que quedan: «La valoración debe ir más allá. Si crees en el proyecto, el método, la idea y el trabajo de un entrenador, los encuentros del desenlace de una Liga son secundarios».

Jugadores españoles, con experiencia y ambición

El Valencia tiene claro a qué patrón responderán los fichajes de este verano. El perfil que se está rastreando es, preferentemente, el de jugadores españoles, con experiencia acumulada en la Liga y, además de reunir la calidad exigible para las aspiraciones de regresar a la Liga de Campeones, que tengan ambición por recalar en el Valencia. Es decir, con el mismo espíritu combativo que en años anteriores mostraron jugadores como Baraja, Marchena o David Villa. El dinero que se disponga va a estar condicionado a las ventas. Por otro lado, García Pitarch va a estar muy pendiente también de la cesión de Halilovic, si el Barça confirma que no tiene hueco en el primer equipo.