Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El borde del área

Vasallos, funciones y fotos

Vasallos, funciones y fotos

Ya saben ustedes cómo son las visitas al Bernabéu son abruptas cuando los de casa se juegan algo. El año pasado y camino de la cabina en el estadio madridista pude escuchar cómo tranquilamente un periodista de Madrid le decía en confianza a uno de Valencia (pensaba que servidor no estaba a la escucha): «como gane el Barça y al Madrid le hagan falta los tres puntos, sabed que aquí no ganáis».

Esa disciplencia con la que se asume y se alimenta el stablishment de los nobles por parte de su vasallaje mediático harán que hoy nadie diga nada en el prime time de los informativos deportivos nacionales de radio ni de tele. Tampoco verán muchas alusiones en el papel impreso. Si acaso algún comentario tangencial sin la firmeza mínima exigible para estos casos.

Para estos casos estamos los de casa. Los que levantamos la voz, pese a que este año no sirva para nada ya que el año es lamentable, pero pese a todo seguiremos saliendo a decir que no comulgamos con ruedas de molino. Es nuestra función, estamos para eso.

Como también estamos para otras aunque no suenen tan agradables. Por ejemplo, también estamos -y es nuestra función- advertir que se necesita un giro de 180 grados en la política deportiva después del desastre de este año. Es más, creo que llegados a este punto habría que comenzar a distinguir en qué punto el tradicional silencio de Mériton es necesario. Y lo es para las negociaciones sobre futbolistas y futuro entrenador. Pero una vez tengamos inquilino en el banquillo, creo que sería bueno que alguien explicara de manera certera el proyecto. Y cuando digo de manera certera es con explicaciones que resulten creíbles. Que no nos vuelvan a decir que «el señor Mendes es un amigo». Porque «un amigo» no coloca desinteresadamente 9 futbolistas en un club en los últimos dos años. Y porque un amigo no te gasta la faena de colocarte a Aderlán Santos por 9,5 millones ni a Danilo Barbosa por 15.

Y ya puestos, estamos -y es nuestra función- para decir que Cheryshev no puede hacerse una foto feliz y contento con Arbeloa y colgarla en su twitter personal. Porque estos pequeños detalles en redes Sociales encabronan al personal y denotan muy poco respeto por el club. Así que el club debe ponerse manos a la obra, porque si no te respetas tú mismo, a ver cómo vas a pedir respeto a los de fuera.

Ahora que si el propietario pierde el trasero por fotografiarse con Cristiano Ronaldo y ya tiene cinco fotos con él (por cierto, ¿cuántas fotos se hace Peter Lim públicamente con futbolistas del Valencia CF?) será complicado pedir que a Cheryshev alguien le diga que lo de ayer, sobra.

Compartir el artículo

stats