A inicios de junio y sin haber empezado la Eurocopa, el mercado de fichajes apenas se está desperezando, pero aún así avanza más velozmente que los movimientos del Valencia, atado de pies y manos mientras no venda antes a ninguno de sus futbolistas descartados. Operaciones bien encaminadas, con un acuerdo cercano a falta de poder justificar el «juego limpio financiero», acaban rompiéndose ante la demora de la firma final.

Primero sucedió con el barcelonista Marc Bartra, con quien se adelantó el Borussia Dortmund pagando su cláusula de rescisión de ocho millones. Ayer, el Sevilla hizo oficial el fichaje de Pablo Sarabia, procedente del Getafe, en la agenda valencianista desde el último mercado de invierno. El mediapunta, formado en el Real Madrid y que encajaba a la perfección en la nueva filosofía del Valencia, será sevillista las próximas cuatro temporadas.

De momento, no hay novedades en el resto de operaciones en marcha. En la profunda reestructuración de la plantilla que quiere llevar a cabo el Valencia, el centro de la defensa es la zona que más se va a renovar. Abdennour, Aderllan Santos y Vezo no cuentan y solo Shkodran Mustafi, a quien se tratará de mantener pese al interés de otros clubes, tiene una plaza fija para el técnico Pako Ayestarán.

El objetivo primordial es Raúl Albiol, cuyo deseo es el de volver al Valencia tras siete años alejado de Mestalla. Pero la posición de fuerza del Nápoles, como informaba ayer este periódico, es de momento inflexible. Así lo confirmó el propietario del club partenopeo, Aurelio de Laurentiis, en declaraciones a Radio Valencia Cadena Ser: «Han ofrecido 6 millones, pero no podrán ficharlo por menos de 15 millones.Con 6, 7 u 8 millones no se puede encontrar siquiera un sustituto», señaló el máximo dirigente.

Albiol acaba contrato en 2017 pero, en la resistencia del Nápoles, interviene otro factor, como las intenciones de cambiar de aires de su otro central, Kalidou Koulibaly. El central francés manifestó ayer sus intenciones de marcharse del club, en probable dirección al Chelsea. La otra vía abierta por el Valencia es la del defensa de Lanús, el paraguayo Gustavo Gómez, con unas cifras que podrían rondar los 7 millones de euros.