El traspaso de André Gomes al FC Barcelona se suma a una serie de operaciones que han reportado al Valencia CF importantes beneficios y han contribuido a llenar sus arcas.

La pasada temporada la entidad de Mestalla vendió a A Nicolás Otamendi al Manchester City por 45 millones de euros. ha realizado en los últimos año ha anunciado ya el acuerdo con el Manchester City por el traspaso de Nicolás Otamendi. La cifra pagada convirtió al argentino en el tercer defensa más caro de la historia.

Otro traspaso sonado fue el de Gaizka Mendieta al Lazio de Roma. El Valencia CF aceptó la marcha del centrocampista 48 millones de euros (8.000 millones de las antiguas pesetas) para evitar que no acabara en las filas del Real Madrid. Lo curioso es que el club blanquinegro no cobró todo lo estipulado porque el Lazio se vio sumido en una grave crisis económica y al final percibió unos 35 millones de euros y el traspaso de Corradi y Fiore para alcanzar la cifra pactada.

David Villa reportó 42 millones a la maltrecha tesorería del Valencia CF. Otra vez el FC Barcelona pujó por un jugador que llegó del Real Zaragoza por 12 millones de euros. Un negocio redondo porque, además, el Guaje ofreció un enorme rendimiento.

Silva, 33 millones al City

Otro jugador que dejó un buen puñado de euros fue David Silva: 33 millones pagó el Manchester City, otra operación que dejo grandes beneficios porque el canario se formó en la cantera de Paterna.

La venta de Piojo López al Lazio por 32 millones (5.400 millones de las antiguas pesetas) fue otra jugosa transacción.

El Tottenham dejó 30 millones de euros en las arcas del Valencia CF por Soldado. En este caso, la entidad de Mestalla se mostró inflexible y dejó claro que o el club londinense pagaba la cláusula de rescisión „los 30 kilos„ o no había nada de que hablar. Y eso fue lo que abonó el Tottenham, ni un euro menos.

Mata también dejó un buen dinero: su traspaso al Chelsea se cifró en 28 millones de euros después de haber dado muy buenas prestaciones al Valencia CF.

Negocio redondo con Gerard

Otra de las grandes operaciones económicas fue el traspaso de Gerard al FC Barcelona. El Valencia, bajo la presidencia de Francisco Roig, lo incorporó procedente de la Masía y acabó traspasándolo a los azulgrana por 24 millones de euros. Una operación al estilo de Roig, de las pocas redondas que el expresidente realizó durante su controvertido mandato.

Otra venta que reportó buenos beneficios fue el del francés Mathieu. El Barça pagó 20 millones por un jugador que estaba a punto de cumplir 30 años y que después no ha justificado el alto precio pagado. Gracias a las ganancias obtenidas el Valencia CF fichó a Otamendi y Mustafi. Y al central argentino le volvió a sacar un extraordinario rendimiento económico porque lo traspasó al Manchester City por 45 millones cuando solo le había costado 12.

Farinós fue otro negocio redondo: un jugador de la factoría de Paterna, es decir coste cero, era vendido al Inter de Milán por 18 millones de euros (3.000 millones de pesetas), la cantidad económica que figuraba en su cláusula de rescisión.