El entrenador del Valencia, Pako Ayestarán, no está contento con el trabajo de Dani Parejo durante lo que llevamos de pretemporada. Por ese motivo lo dejó sin jugar el pasado sábado en el amistoso ante el Feyenoord, ya que no jugó ni un solo minuto. El técnico vasco busca una reacción en el centrocampista madrileño, eje del juego del equipo en el centro del campo, ya que no está entrenando al nivel que le gustaría.
Ayestarán dejó a Parejo en el banquillo en beneficio del canterano Carlos Soler, primero, y de Álvaro Medrán, después, en la segunda parte. Mientras, el jugador de Coslada se quedo en el banquillo. Es una medida de presión para que Parejo reaccione y se comprometa más con el Valencia.
El club de Mestalla tiene claro que, bajo ningún concepto, va a vender al futbolista al Sevilla ni a otro equipo español, después de que en las últimas semanas haya surgido el interés del club hispalense y, de al menos, otro conjunto más. Parejo, que perdió la capitanía durante la pasada temporada, en los peores momentos del equipo cuando estaba bajo la dirección de Gary Neville, volvió a ser un futbolista relevante en el tramo final del campeonato. Ya lo fue en el ejercicio anterior. Parejoa perdido apoyos importantes en el vestuario como Barragán o Piatti.
Es evidente que su futuro está en el aire. Esa incertidumbre se refleja en el campo de entrenamiento y en su convivencia diaria.
Parejo llegó al Valencia en la temporada 2011/12 procedente del Getafe por 6 millones de euros. El pasado año, el club le renovó el contrato hasta 2020 y aumentó su claúsula de rescisión de 25 a 50 millones de euros.
El entrenador del Valencia se vio obligado a dar explicación pública tras el partido contra el Feyenoord, evitando cualquier polémica: «Tú tienes que tener cuidado por si tienes alguna lesión y tienes que sacrificar a alguno y hoy les ha tocado a ellos».
